Ríos y Massú impulsan el proyecto.
Juan Eduardo López, El MercurioSANTIAGO.- Dos de los principales jugadores en la historia del tenis chileno han tomado la bandera y comenzaron a mover sus influencias con el fin de conseguir recursos para el deporte que parece estar entrando en una crisis, después de años de alegrías y logros.
Marcelo Ríos, Nicolás Massú y la Federación de Tenis han propuesto varios cambios, los que se lograrían con aportes del Estado. Esto ha abierto el debate sobre cuáles son los puntos más relevantes para zafar de una crisis.
De momento, se conoce que un centro de selección de menores, la búsqueda de talento en regiones, un mayor número de futuros y challengers, y una mejor infraestructura serían los ejes fundamentales.
Según comenta Luis Guzmán, ex capitán de Copa Davis,a El Mercurio "la intencionalidad es lo que importa. Si el dinero se va a ocupar en proyectos concretos que busquen un producto final, será válido".
"Ya vimos que Guillermo Núñez se fue a una universidad de Estados Unidos, seguro que por plata. Hay que ver en qué se va a invertir, en qué jugadores, y cómo se va a evaluar", agrega el entrenador, quien plantea una inquietud: "Deberíamos tener centros de entrenamiento en las ciudades importantes de regiones, visualizar a través del ranking dónde instalarlos".
Paul Capdeville, ex número 1 de Chile, señala: "Me parece muy bueno el proyecto, que el tenis, que tantas alegrías dio a Chile, tenga el lugar que se merece. Es importante darle movimiento a la competencia, aumentar los futuros y challengers. La formación debe ser lo principal de cualquier reestructuración. Ahora lo importante es darles raquetas a los niños, que tengan la opción de jugar, de surgir. Crearles el hábito. La construcción de un estadio, por ejemplo, puede quedar para más adelante".
Jaime Fillol, ex 14° del mundo, valora: "Siempre va a ser bueno trabajar y aportar en el desarrollo del tenis". Gabriel Silberstein propone otra idea: "También deberían enfocarse en la creación de buenos profesionales. Hoy, los entrenadores son de calidad porque tienen talento o por su esfuerzo individual, pero no hay una escuela para entrenadores, que es importante a largo plazo. Si queremos que mil niños jueguen bien, tienen que haber muchos buenos entrenadores, que los preparen en lo físico, técnico y psicológico".
El ex tenista Róbinson Gamonal tiene una visión crítica del proyecto, sobre todo apuntando al centro de selección de menores: "La labor de ellos es ayudar a los menores de las mejores academias y no formar su propia academia".
"Con este centro no sé si lograrán algo. Las lucas deberían ir a la masificación. Aprovechar a Ríos y Massú para eso, ir a difundir a colegios y municipalidades", opina Gamonal, y argumenta: "El problema más grande es que cada año hay menos tenistas federados, y la razón es que el producto es malo, no hay motivación para que los niños se dediquen al tenis. ¿Para qué más canchas, si las que hay están vacías?".