SANTIAGO.- Todo comenzó como una simple idea, sin mayores intenciones, pero un día decidieron convertir su sueño en realidad: Llevar el balonmano chileno a lo más alto de la élite mundial.
"A través de nuestra experiencia y red de contactos estamos llevando a jóvenes promesas de nuestro deporte a distintos países de Europa con el objetivo que se formen grandes jugadores", cuenta de entrada Emil Feuchtmann sobre su iniciativa.
Para eso están trabajando desde principio de año los cuatro hermanos Feuchtmann Pérez. Emil, Inga, Harald y Erwin pusieron a andar su ambicioso proyecto en el handball denominado "F Connection".
Y no es una idea cualquiera porque la base de su proyecto tiene respaldos: experiencia, aprendizaje, referencias y reputación. Todo ganado durante sus carreras en Europa y ahora quieren que otros jugadores tengan la oportunidad de partir al Viejo Continente.
La metodología
"Estamos formando una base de datos, buscando en colegios, detallando perfiles, viajando a Chile a ver partidos y tenemos entrenadores que también nos proporcionan información", cuenta Inga recientemente fichada por el TSG Ober Eschbach de Alemania gracias a esta iniciativa.
Otro punto clave en su proyecto pasa por la red de contactos. Emil ya lleva trece años de carrera en Europa pasando por España, Austria y Alemania, por lo que ha conocido muchos clubes, jugadores, técnico y dirigentes.
"Todos tenemos experiencia y a través de eso ofrecemos jugadores o los mismos clubes nos piden perfiles de deportistas. Nosotros buscamos en nuestros antecedentes y así podemos ofrecer a un jugador chileno", dice el mayor de los hermanos.
Videos, fotos, historiales, reuniones por Skype o simplemente la confianza depositada en alguno de los oriundos de Punta Arenas sirven para que un jugador de nuestro país pueda partir a Europa. Eso, gracias a esta iniciativa.
El perfil
No basta con tener técnica, calidad o habilidades para el balonmano, el proyecto "F Connection" busca jugadores completos y que sobre todo sean responsables y disciplinados.
"Podemos conocer muchos buenos jugadores, pero si no son responsables y trabajadores no nos sirven porque si nosotros llevamos a un jugador así a un club y no responde, es nuestra reputación la que se ve afectada", explica Emil.
Más iniciativas
"F Conecction" no es el único proyecto de estos cuatro hermanos porque hace más de un año existe "Feuchtmann Group", iniciativa que engloba escuelas, clínicas y una revista especializada.
En nuestro país ya existen dos escuelas, una en Santiago y otra en Punta Arenas, ambas con el objetivo de formar y captar a los nuevos talentos. También están las clínicas que en su última edición contó con la presencia de un prestigioso entrenador alemán, Gunter Funk, y pasó por la capital, Arica, Valparaíso y Concepción.
"Esto recién comienza, queremos ir creciendo cada vez más y que los jugadores chilenos que lleguen a Europa crezcan considerablemente. Nosotros trabajamos sin fines de lucro, lo hacemos por pasión, por dar una mano a los jóvenes talentos y por profesionalizar este deporte en nuestro país", dicen los hermanos.