SANTIAGO.- Una final de Mundial perdida no se compara con nada, pero Argentina puede decir que tuvo su pequeña revancha. 52 días después de caer en la definición de la cita planetaria, la selección albiceleste se sacudió en parte y venció categóricamente a Alemania por 4-2.
Y quien se robó todas las miradas fue Ángel di María, la gran figura en el actual momento del fútbol trasandino. El "Fideo" se desquitó en parte por no poder jugar en el duelo en Brasil y lo hizo con una espectacular actuación. Tres asistencias y un gol fue el aporte del ahora extremo del Manchester United.
Además, fue el triunfal debut de Gerardo Martino como nuevo estratega de Argentina. El ex adiestrador de Barcelona comenzó con el pie derecho su era en la selección, a la que llegó tras reemplazar a Alejandro Sabella.
Como si fuera poco, la goleada de los albicelestes cortó una impresionante racha de 18 duelos consecutivos sin conocer de derrotas de los alemanes.
La última vez que los teutones cayeron fue el 2 de junio del año pasado, cuando se inclinaron por 3-4 ante Estados Unidos en duelo amistoso disputado en Washington. De ahí sólo alegrías, siendo la obtención de la Copa del Mundo la más importante.
Los tres primeros goles de los trasandinos fueron tras habilitaciones de Di María. La cuenta la abrió Sergio Agüero a los 20 minutos, aumentó Erick Lamela a los 39' y ya en el segundo tiempo Federico Fernández puso el 3-0 a los 47'. Ahí llegaría la obra maestra del ex jugador del Real Madrid quien le picó la pelota a Weidenfeller.
Las conquistas del honor de los vigentes campeones mundiales fuerons las anotaciones de André Scurrle (51') y Mario Götze (77'), el mismo que marcó el gol más importante de su vida al convertir la única cifra que le dio el cuarto título planetario a su país.
En Argentina, por hoy, no extrañaron a Lionel Messi...
