El capitán de Inglaterra, Wayne Rooney, señaló que ''debemos asegurarnos que los aficionados vuelvan a creer en nosotros''.
EFELONDRES.- La falta de ilusión de los aficionados ingleses con su selección de fútbol quedó reflejada en la ausencia de público que registró el miércoles el estadio Wembley, la peor en un partido internacional desde su remodelación.
Sólo 40.181 espectadores, la mitad del aforo, presenciaron el inicio de un nuevo proceso en Inglaterra tras el fracaso en el Mundial de Brasil.
Según la prensa inglesa, el triunfo por 1-0 ante Noruega, con un tanto de penal del nuevo capitán Wayne Rooney, no invita tampoco al optimismo.
"Si esto debía ser una nueva era, se parece dolorosamente a la última", escribió hoy el diario The Independent. "Apenas hubo motivos para la esperanza", aseguró The Telegraph.
Inglaterra, que el lunes comienza en Suiza el camino a la clasificación para la Eurocopa de 2016, sólo lanzó dos veces a la portería noruega.
"Estamos aún en proceso de aprendizaje", justificó Rooney, capitán y con 28 años uno de los más veteranos del equipo tras los retiros de Steven Gerrard y Frank Lampard. Su gol le sitúa como el cuarto máximo anotador de la historia del país.
"Sabemos que tras el Mundial es complicado. Ahora debemos asegurarnos en hacer una buena clasificación y que los aficionados vuelvan a creer en nosotros. Eso es lo que buscamos", recalcó Rooney.
El técnico, Roy Hodgson, defendió a su joven plantel, que tuvo una media de edad de 24 años. "Sterling, Sturridge o Wilshere tienen el potencial de entusiasmar y de llevar al equipo hacia delante", afirmó optimista.