Lo que pasó en Valparaíso.
Héctor Yáñez, El MercurioVALPARAISO.- Colo Colo no pudo coronarse bicampeón del fútbol chileno tras caer 0-2 ante Santiago Wanderers en Valparaíso. Y el duelo entre albos y caturros estuvo marcado por una serie de hechos.
- Pelea en el ingreso de la barra de Colo Colo
A las 15 horas un grupo de hinchas de Colo Colo se aprestaba a hacer ingreso por el sector Las Torpederas al estadio Elías Figueroa cuando fueron interceptados por unos 30 fanáticos del cuadro rival.
Ambas barras comenzaron una riña en la que se tiraban piedras, palos y golpes y que sólo pudo ser disuelta por la acción de Carabineros que utilizó gases lacrimógenos y el "guanaco" para tranquilizar la situación.
- El amargo partido de Esteban Paredes
En el hotel de concentración Paredes fue el único que realizó sesiones especiales en la mañana del sábado y Tapia no perdía las esperanzas de tenerlo como titular. Pero no.
Cuando arribó el bus de Colo Colo al estadio tanto el doctor Cheyre como el mismo delantero confirmaron que iría al banco y que sólo ingresaría si el partido lo ameritaba. Incluso se pensó que no sería ni alternativa ya que no salió a calentar junto al resto de sus compañeros. Al rato salió con un vendaje y muslera especial, muy similar a la que usó Gary Medel ante Brasil en el Mundial.
Desde la banca fue el que más alentó a sus compañeros y en los trabajos de los suplentes era el que más corría. Hasta que ingresó con el marcador 0-0 pero sólo tuvo una ocasión de peligro. Se retiró en silencio y con evidente amargura del recinto porteño.
- Sobrepasadas las medidas de seguridad
Desde un inicio se previó que los hinchas de Colo Colo invadirían la cancha. Algunos forofos estuvieron todo el duelo parados encima de las rejas y en constante discusión con los pocos guardias presentes en ese sector.
Ya cuando se enteraron que la U ganaba y luego con el primer gol de Wanderers no se aguantaron y saltaron hacia el campo de juego. Además, durante todo el cotejo hubo bengalas y fuegos de artificio.
El balance final de Carabineros fue de sólo 13 detenidos: 5 por drogas, otros 5 por invasión a la cancha y otros tres por porte de bengalas.
- El festejo que no fue
Si bien el presidente de Wanderers, Jorge Lafrentz, no lo quiso confirmar, trascendió que el cuadro caturro tenía ya preparada una celebración por si se coronaban campeones.
Esta se iba a llevar a cabo en la Plaza Sotomayor y participaría el plantel y cuerpo técnico. Además una banda en vivo pondría la música para festejar la cuarta estrella.
- Las radios se robaron la atención
Si bien todo el público y prensa miraban el duelo en el Elías Figueroa, su atención también estaba puesta en lo que sucedía en el Nacional entre la U y Calera.
Es por eso que las radios, pendrives y celulares fueron el mejor amigo para todos aquellos que se informaban de lo que pasaba en Santiago. Y obviamente los despiertos comerciantes no perdieron la oportunidad y en los alrededores del estadio se pusieron a vender radios en miniatura para los asistentes.