Junior Malanda (20), jugador belga fallecido el 10 de enro del 2015.
EFEBRUSELAS.- Cerca de 1.500 personas, entre compañeros, familiares y aficionados, despidieron este martes al futbolista belga, Junior Malanda, en un funeral en Bruselas celebrado diez días después de que el jugador del Wolfsburgo alemán sufriera un accidente vehicular que le quitó la vida.
El centrocampista de 20 años perdió la vida el 10 de enero al chocar el coche en el que viajaba en una autopista de Alemania cerca de Porta Westfalica, unos 350 kilómetros al oeste de Berlín, cuando se dirigía a un aeropuerto para volar a Sudáfrica y sumarse a la concentración de su equipo.
Malanda iba en el asiento trasero del vehículo y no llevaba cinturón de seguridad, por lo que salió disparado con el impacto. El coche, un todoterreno, circulaba con exceso de velocidad en medio de una fuerte lluvia.
Asimismo, el funeral tuvo lugar en la basílica nacional de Bélgica. "La iglesia a la que iba Malanda de niño con sus padres", señaló el cura de la ceremonia.
Los asistentes depositaron sobre el ataúd blanco, rosas, coronas de flores, fotos e incluso una chaqueta del club SV Zulte Waregem, donde jugó Malanda antes de fichar por el club de la Bundesliga.
En una de los muchos arreglos florares, el enviado por su último equipo (Wolfsburgo), se leía la frase: "Para siempre en nuestros corazones".
Durante la jornada se pudo ver al entrenador del Wolfsburgo, Klaus Allofs, compañeros de equipo y numerosos jugadores, sentados en las primeras filas, donde no aguantaron la emoción y en numerosas oportunidades tuvieron que limpiar sus lágrimas durante el acto.
Finalmente, el fútbol alemán recordará al fallecido Malanda en la próxima jornada con un minuto de silencio antes de cada partido de la Bundesliga.