El tenista chileno Christian Garín.
El Mercurio
SANTIAGO.- El gran triunfo que logró anoche el tenista chileno Christian Garín (247° de la ATP) en los octavos de final del Challenger de Santo Domingo ante el argentino Horacio Zeballos (124°), por 1-6, 7-6 (3) y 7-6 (5), fue, sin duda, una de las más resonantes de su corta carrera que se inició en 2011.
El nacional, de 18 años, tuvo que batallar más de la cuenta y sacar a relucir su mejor derecha y juego de fondo para vencer la trasandino, el mimo que con 29 años y una dilatada experiencia en el circuito lo llevaron el 2013 a ganar el título del ATP de Viña del Mar, luego de derrotar en la final al "Rey" de la arcilla, el español Rafael Nadal.
Si bien este año el arranque de temporada no ha sido el más auspicioso para Garín, pues sólo ha cosechado dos victorias, en la qualy del Challenger de Bucaramanga, Colombia, y las clasificaciones del ATP 250 de Quito, Ecuador, los dos triunfos que ha obtenido esta semana en el certamen de República Dominicana le dan una mayor confianza para su próximo desafío.
Y no será un desafío cualquiera, pues si el nacido en Iquique deja en el camino al potente austriaco Gerald Melzer (148°) dejará en su palmarés que un 13 de febrero de 2015 conquistó el resultado más importante como tenista profesional: avanzar por primera vez a las semifinales de un torneo Challenguer.
Aunque el nacional hasta hoy suma cuatro títulos en campeonatos Futuros, éstos son de menor categoría debido al nivel de competidores y escasos puntos que entrega para el ranking mundial.
El duelo está programado para no antes de las 21:00 horas de nuestro país, y será la tercera vez que Garín y Melzer se ven las caras en el circuito, con un triunfo para cada uno.
Si el chileno continúa avanzando en torneo caribeño y la próxima semana cumple un buen cometido comenzará a ponerle presión al capitán de Copa Davis, Nicolas Massú, para convertirse en el posible singlista en la serie ante Perú, el 6, 7 y 8 de marzo en Santiago.
Todo depende de Christian Garín.