La frustración de Alexis.
AP
SANTIAGO.- Alexis Sánchez, lucha, busca, se entrega, roba balones, va atrás. Pero todo eso no sirve cuando un equipo anda mal. El Arsenal cayó 3-1 como local ante el Mónaco este miércoles en la ida de los octavos de final de la Champions League.
El delantero chileno fue el más rescatable en un conjunto que fue sorprendido por un elenco francés que aprovechó las facilidades y con un juego simple y directo quedó a un paso de los cuartos del torneo continental.
El tocopillano se genera opciones, habilita a sus compañeros, pero siempre le falta un "socio", alguien que lo acompañe en su idea y forma de hacer rendir al equipo.
En el primer tiempo Sánchez jugó muy retrasado, siempre muy cerca del mediocampo, incluso yendo a recuperar balones a su propio terreno. Por eso mismo el Arsenal tenía pocas opciones en el arco rival.
Ya en el segundo lapso se soltó más el chileno y comenzó a generar. Pareció demasiado tarde sí, porque el Mónaco ya ganaba 2-0 con tantos de Geoffrey Kondogbia a los 38' y Dimitar Berbatov a los 53', tras un gran contragolpe de la visita.
Parecía resuelto el partido, pero hubo aire para los ingleses casi al final del partido. A los 90' Oxlade Chamberlain anotó desde 20 metros el mejor gol de la tarde, entregándole a esa altura algo de esperanza al conjunto de Wenger.
Pero vino otro contragolpe cuando el Arsenal se iba en busca del empate. Lo aprovechó Yannick Ferrerira Carrasco, quien a los 93 minutos puso el 3-1 en favor de los franceses que quedan a un paso de la ronda de los ocho mejores.
Poco hizo el Arsenal que sigue evidenciando problemas defensivos con un Alexis Sánchez que a veces intenta solo salvar a un equipo que naufraga con rendimientos muy irregulares.
Para seguir soñando, el cuadro del chileno debería golear en la vuelta en Francia. Algo que se ve muy lejos de conseguir...