De la crisis a la alegría de ser líder en el Clausura y la Libertadores.
Emol/Archivo El Mercurio.
SANTIAGO.- Colo Colo hoy vive un momento de gloria. Tras su
triunfo 2-1 sobre la Universidad de Chile los albos se encumbraron como solitarios líderes del Torneo de Clausura 2014-2015 con 23 puntos. A esto se suma que son los punteros del grupo 1 de la Copa Libertadores con 6 puntos. Todo es alegría.
Pero hace sólo 61 días atrás, el panorama era muy distinto. El 18 de enero el Cacique
sólo empataba como local ante Huachipato y sumaba recién su primer punto en el certamen local tras dos derrotas consecutivas. Estaban en una pobre 15ª posición.
Fue justamente después del lance contra los acereros que el técnico Héctor Tapia reconocía el mal momento que atravesaban. "Estoy en Colo Colo y sin duda que si en tres partidos saco un punto, seguro que va a haber crisis",
fueron las palabras de un atribulado estratega.
Esta "crisis" dio paso a una serie de especulaciones de problemas internos del DT con la dirigencia, donde incluso se hablaba que perdía piso y se le criticaba por haber hecho contrataciones de mucha edad.
Para peor, aún tenía que lamentar la ausencia obligada de Julio Barroso por la suspensión que acarreaba. Pero desde ese día, todo cambió. El primer indicio de repunte llegó el 1 de febrero cuando
vencieron como visita 2-0 a O'Higgins.
Y de ahí no pararon, ya que tras el empate contra los de la usina han jugado 11 compromisos, con nueve victorias, un empate y una sola caída. Ya nadie se acuerda que en Macul era todo amargura.
El buen andar en el Clausura es acompañado de la campaña en la Libertadores donde debutaron venciendo a Atlético Mineiro en casa. Luego cayeron como visita ante Santa Fe, pero se repusieron y derrotaron a Atlas de México en el Monumental. 6 puntos y liderato de su zona.
En la cancha regresó Barroso y se afirmó una oncena titular base teniendo a Justo Villar en el arco, el zaguero argentino, Jaime Valdés en el mediocampo y Esteban Paredes en ofensiva como columna vertebral.
"Estamos en una situación privilegiada y no la podemos soltar que es que si nosotros hacemos nuestro trabajo y ganamos nuestros partidos deberíamos salir campeones porque tenemos una diferencia a nuestro favor".
Ese es el discurso de Tapia 60 días de reconocer la "crisis" que vivieron.
