SANTIAGO.- Si bien Jeremy Mathieu fue el gran protagonista del triunfo 1-0 del Barcelona sobre el Celta, la actuación de los chilenos Claudio Bravo y Fabián Orellana es de los más destacado en España.
Y es que ambos nacionales vivieron un marcado cara y sello. Las loas fueron para el portero del conjunto catalán por sus intervenciones, mientras que las críticas son para el delantero por su
tonta expulsión.
(Ver video)Mundo Deportivo señala que Bravo "en Balaídos estuvo simplemente perfecto. Sacó balones de gol a toda la delantera del Celta, con mención especial para Nolito, Orellana y Larrivey. En las salidas contagió seguridad por alto y, encima, arregló, siempre atento, algún despiste de Alves".
En esa misma línea agrega que "Bravo, el jugador con más ritmo del Celta-Barça. Si el Barça logra campeonar en esta Liga, un pedazo de trofeo deberá ser para el chileno".
Por su parte, Sport recalca que "al guardameta chileno se le giró faena en una primera parte en la que evitó en dos ocasiones que el Celta se adelantase en el marcador. Salvó los muebles cuando más descentrado esta el FC Barcelona y confirmó que es un seguro bajo palos".
Mientras que As apunta que "hizo una parada sensacional en la primera parte y pudo cometer penalti sobre Nolito, aunque antes llega a tocar el balón. En la segunda parte apenas tuvo trabajo y vio cómo la retaguardia le evitaba complicaciones".
Críticas para Orellana
Este mismo periódico cuestionó al delantero nacional por su expulsión. "El chileno se autoexpulsó al final del partido con una acción ridícula. Tuvo la ocurrencia de lanzar un trozo de césped a Busquets".
A su vez, Faro de Vigo comenta que "Orellana, en una niñería injustificable, se ganó la expulsión por lanzar un poco de hierba al rostro de Busquets".
Finalmente, Marca considera que "la frustración de los gallegos quedó ejemplificada en Orellana, que perdió la cabeza cuando Busquets se tomaba con excesiva calma el saque de una falta. El chileno arrojó un trozo de césped a la cara al centrocampista, lo que le costó la roja directa. Lo nunca visto en un campo de fútbol".