La UC golea a La Calera y se mantiene en la lucha por el título del Clausura

SANTIAGO.- En tan sólo cinco días, Universidad Católica tuvo su revancha tras la dura derrota en el clásico ante la U luego de en que el duelo que abrió la decimocuarta fecha del torneo de Clausura goleara por 4-2 a Unión La Calera en San Carlos de Apoquindo.

Con los tantos de Roberto Gutiérrez (1'), José Luis Muñoz (20'), Diego Rojas (24') y un autogol de Tomás Charles (89'), el conjunto dirigido por Mario Salas sumó 25 unidades y se colocó momentáneamente en el subliderato, a dos puntos de Cobresal, que juega mañana ante Ñublense.

Las anotaciones de Tomás Charles (15') y Paulo Rosales (27') no alcanzaron para una escuadra cementera, que pese a estar realizando un buen torneo, sigue complicada con el tema del descenso a Primera B por su puntaje en la tabla de coeficiente de rendimiento.

El compromiso disputado en la precordillera tuvo una gran intensidad de principio a fin. Y es que apenas transcurridos 40 segundos del pitazo inicial de Julio Bascuñán, los locales ya se adelantaban con un tanto de Gutiérrez, quien aprovechó una gran maniobra entre Michael Ríos y Erick Pulgar para abrir la cuenta.

Se pensó que con el tempranero gol del delantero se venía la goleada cruzada, pero nada de aquello sucedió. El elenco de Ariel Pereyra igualó tras un grosero error del meta Fabián Cerda y los fantasmas de las fallas defensivas se le volvían a aparecer a los franjeados.

Pero la UC encontró la respuesta casi inmediata, gracias a las conquistas de Muñoz y Rojas. A los 27', el juez Bascuñán vio un penal inexistente en favor de los forasteros, que Rosales convirtió para ya animar un frenético partido, tanto en el trámite como en el marcador.

Tras esa acción, no hubo más alteraciones en el tablero hasta bien entrada la segunda etapa. Pero la UC sufrió y mucho. En variadas ocasiones, permitió los avances de la ofensiva calera. Dos veces salvaron el empate sobre la línea. A diferencia de lo sucedido con los azules la semana pasada, esta vez Católica tuvo la suerte de su lado.

Cuando el encuentro entraba en su recta final, la UC recién pudo liquidar la brega en su favor luego de que Charles ingresara el balón en su propia meta en su intento por despejar.

Un triunfo que lava las heridas y que mantiene a los cruzados en la pelea por el campeonato. Ahora los pupilos de Salas deberán esperar que tanto Cobresal como Colo Colo, su próximo rival, enreden puntos para seguir manteniendo viva la ilusión por levantar el trofeo.