Maradona y Platini manifestaron su apoyo a la candidatura de Al Hussein a la presidencia de la FIFA

SANTIAGO.- El príncipe jordano Ali Bin Al Hussein, uno de los aspirantes a la presidencia de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA), cuenta con el apoyo explícito del ex futbolista argentino Diego Maradona y el actual presidente de la UEFA, Michel Platini.

Ambos deslizaron fuertes críticas en contra del actual mandamás, Joseph Blatter. En entrevista con el medio británico Daily Telegraph, Maradona se fue con todo en contra del suizo.

"Con él, la FIFA se ha convertido en una vergüenza y en una dolorosa molestia para los que amamos el fútbol", declaró el argentino. "Yo llamo a Blatter el 'hombre de hielo' porque le falta la inspiración y la pasión que constituyen el mismo corazón del fútbol", apuntó.

Pero no fue la primera vez que Maradona mostraba públicamente su respaldo al jordano y cargaba contra Blatter, al que ha señalado como enemigo en muchos momentos en los últimos años.

"Tengo la íntima convicción de que Ali (...) podría ser un gran presidente de la FIFA", afirmó, recordando que es un apoyo "a título personal" porque él no tiene derecho de voto al no ser presidente de una Federación nacional.

El argentino publicó el pasado mes una foto con el candidato deseándole éxito en la votación del 29 de mayo: "Tiene todo mi apoyo para cambiar la FIFA de una vez por todas", escribió.

Maradona se desplazó incluso a Jordania, donde participó en una feria de fútbol, se bautizó en el río Jordán y volvió a mostrar su respaldo al príncipe Ali, al que dijo que ayudaría a "cambiar el fútbol" si es finalmente elegido.

Al apoyo de la candidatura se sumó también Platini, quien en entrevista al diario francés L' Equipe disparó de igual manera en contra de Blatter.

"Tengo la íntima convicción de que Ali podría ser un gran presidente de la FIFA", sintetizó el directivo galo.

Para finalizar, aseguró que Blatter rompió una promesa en las pasadas elecciones de 2011, donde aseguraba que el actual período sería su último en el sillón de la FIFA.

"Nos había pedido, mirándonos a los ojos, que le apoyáramos para el que sería su último mandato", conclúyó Platini, marcando la total distancia con el suizo, con el que había tenido una estrecha relación en la década de los noventa.