PARIS/LONDRES.- Las Bolsas mundiales se vieron sacudidas hoy también por el terremoto registrado en Japón, la tercera economía del mundo y uno de los mayores exportadores.
Sin embargo, aunque la catástrofe suma incertidumbre a una situación ya enrarecida por los conflictos en el mundo árabe, no se produjo una ola de pánico en los mercados.
Por ahora es imposible calcular con exactitud las consecuencias en Japón, pero en cualquier caso son enormes: las fábricas están paralizadas, los campos inundados y el abastecimiento energético parcialmente cortado.
El índice principal de la eurozona, el EuroStoxx 50, perdía hoy un 0,50%. El alemán Dax era el más afectado con un 1,1%, que lo situaba además por debajo de la marca psicológica de los 7.000 puntos. También caían Madrid, Londres y París, así como Hong Kong, Shanghai y antes de la apertura las estadounidenses NYSE y Nasdaq.
Como era de esperar la Bolsa más afectada fue la de Tokio, que perdió un 1,73 por ciento y cerró con 10.254 enteros.
Un estudio del banco Commerzbank señala que la catástrofe se suma a la crisis ya causada por las revueltas en Cercano Oriente, el alto endeudamiento en la eurozona y en Estados Unidos.
El terremoto de Japón sumó imágenes no solamente de reactores nucleares en llamas, sino que la empresa de electrónica Sony tuvo que cerrar seis fábricas, el fabricante de coches Toyota tres y también pararon la producción Honda y Nissan. El aeropuerto de Tokio fue cerrado temporalmente así como los puertos, por el temor a un tsunami.
Los precios del petróleo bajaron en los mercados a causa del terremoto, ya que Japón es el tercer país con mayor consumo de materias primas después de China y Estados Unidos.
El barril (159 litros) del tipo Brent del mar del Norte para entrega en abril se pagaba a media jornada en Londres a 112,62 dólares, 2,81 dólares menos que el jueves. El West Texas Intermediate (WTI) estadounidense perdió 3,34 dólares, hasta los 99,36 dólares.
Japón depende de las importaciones en casi todas las materias primas que consume. La demanda de petróleo caerá a corto plazo como consecuencia del sismo, el peor de la historia del país, según un análisis del Commerzbank.
El Banco de Japón hizo una inmediata declaración en la que garantiza que tomará todos los recaudos para asegurar la estabilidad de los mercados financieros e inyectar liquidez.
Los mayores temores rodean en estos momentos a las empresas de seguros como Munich Re, Swiss Re o Hannover Rck, que podrían tener enormes pérdidas que se suman a las ya registradas por los sismos en Nueva Zelanda y las inundaciones de Australia.