SANTIAGO.- Argumentando que ya se cumplieron los pasos para iniciar una nueva fase, el presidente de La Polar, Heriberto Urzúa, anunció hoy su renuncia a la presidencia de la empresa, a 10 días de haber asumido el cargo tras la renuncia de Pablo Alcalde y en medio de la profunda crisis por los créditos repactados unilateralmente.
"Se ha cumplido una etapa importante y el paso que sigue para la empresa es que se genere un nuevo entorno financiero y de confianza", dijo Urzúa a través de un comunicado, explicando que la decisión fue presentada al directorio ayer en una reunión extraordinaria.
La renuncia de Urzúa se registra en un día complejo para la compañía, ya que hoy se reanuda la transacción de las acciones tras estar suspendidas por la SVS desde el lunes pasado. De acuerdo con diversos operadores y analistas, los papeles podrían transarse entre $1.000 y $300, lo que representaría una fuerte baja, ya que su última cotización fue de $1.430.
Además, mañana comienza la atención en las tiendas a los clientes que fueron repactados y a quienes se les ofrecieron diversas medidas, lo que implica un complejo escenario para la compañía.
"Como es de conocimiento público, el próximo miércoles 22 de junio se realizará una junta extraordinaria de accionistas donde se deberá votar un aumento de capital de hasta US$ 400 millones. Esta reunión se efectuará en medio de una profunda crisis de la compañía, que ha revelado prácticas contrarias a sus propias políticas. Lo anterior es consecuencia de un fraude, que aparece lesionando la confianza, tanto de nuestros clientes, como la de sus accionistas y la del país", explicó el ex presidente.
"Acepté asumir como presidente transitorio de La Polar por un breve periodo, con el único propósito de buscar la verdad, esclarecer los hechos y sentar las bases que permitieran generar condiciones para enfrentar el futuro de la compañía", agregó.
El empresario señala que "por el bien de la compañía, a mi juicio, este paso debe ser encabezado por un nuevo Presidente, que permita renovar y descomprimir el ambiente actual y que ayude a generar un nuevo contexto para La Polar".
Urzúa señaló que su único propósito era "buscar la verdad, esclarecer los hechos y sentar las bases que permitieran generar condiciones para enfrentar el futuro de la compañía".
Para ello, señala el ex directivo, "entre otras medidas, se contrató a nuevos auditores y asesores externos de primer nivel, se removió a aquellos ejecutivos a cargo de las áreas cuestionadas, se contrató a asesores financieros para diseñar un plan de rescate, a asesores legales para estudiar las acciones civiles y penales en contra de los responsables, se logró estimar el nivel de provisiones e informarlo a la SVS y el mercado en general, y se diseñó un plan para resolver la situación de clientes morosos que fueron repactados unilateralmente".
Para Urzúa "todas las acciones llevadas adelante han permitido transparentar información, para que La Polar logre salir adelante sobre bases reales".