LA HABANA.- Pocas horas antes de finalizar una visita de trabajo a Cuba, el presidente de Ucrania, Leonid Kuchma, entregó a su homólogo Fidel Castro la más importante condecoración de esa nación europea.
En una ceremonia organizada la noche del viernes, Kuchma impuso a Castro la Orden del Príncipe Yaroslav "El Sabio", en primer grado, máxima distinción de Ucrania.
El mandatario ucraniano dijo que la condecoración significa un "premio al mérito personal del líder de la República de Cuba en la superación de las consecuencias trágicas humanas de la catástrofe de Chernobyl y en el fortalecimiento de la amistad y el desarrollo de la colaboración entre nuestros países".
Ambos presidentes habían visitado el viernes el centro de salud de Tarará, situado al este de la capital, donde desde hace 10 años se han rehabilitado unos 15.000 niños, la mayoría ucranianos, que han sufrido las consecuencias del accidente nuclear de Chernobyl.
"Cuba ha dado vida a todos estos niños. Todo el mundo nunca olvidará este gesto, tan importante para nosotros", añadió Kuchma en una ceremonia en la que entregó una importante ayuda valorada en unos 100.000 dólares al centro de Tarará.
"Jamás olvidaremos lo hecho por usted", señaló.
Tras la imposición de la Orden, Castro expresó que la recibía como una gran prueba de amistad y generosidad, "especialmente si se toman en cuenta las circunstancias internacionales en que usted nos hace la visita".
"Es una etapa sumamente compleja donde el caos, la confusión y la cobardía abundan en el mundo", apuntó el presidente cubano.
El presidente ucraniano, quien se había entrevistado en privado con Castro, llegó el jueves a La Habana, acompañado por varios funcionarios de su gabinete y un grupo de empresarios de su país interesados en iniciar una nueva etapa de sus nexos comerciales con la isla caribeña.
El comercio con Ucrania representaba más del 30 por ciento del comercio total de Cuba con la desaparecida Unión Soviética, alcanzando cientos de millones de dólares, pero desde hace una década disminuyó considerablemente tras la caída del bloque soviético.
