AUSTIN, Texas.- El Presidente electo George W. Bush designó este martes a un miembro de la oposición para su gabinete, el demócrata Norman Y. Mineta, quien ha servido como secretario de Comercio al Presidente saliente Bill Clinton y ejercerá ahora el cargo de secretario de Transportes.
Bush nombró también a Spencer Abraham como secretario de Energía; y a la activista hispana Linda Chávez, como secretaria de Trabajo. Abraham intentó sin éxito la reelección como senador por Michigan, y Chávez ha dirigido la comisión de derechos civiles en el gobierno de Ronald Reagan y preside actualmente el Centro para la Igualdad de Oportunidad de Washington.
"No puede haber otra mejor forma de comenzar el año nuevo que completando el gabinete, uno de los más sólidos que presidente alguno haya podido armar", indicó Bush, quien ha completado así la conformación de su gabinete para su gobierno de cuatro años que se inicia el 20 de enero.
Luego de nombrar su gabinete de 13 republicanos y un demócrata, a Bush solamente le falta designar dos cargos más de relevancia: el de director de la CIA y el embajador ante las Naciones Unidas.
Mineta, de 69 años, es un ex congresista demócrata por California, fue designado secretario de Comercio hace seis meses y se convirtió en el primer asiático que ocupa un cargo de gabinete en el gobierno federal de los Estados Unidos.
Abraham, de 48 años, estuvo en el Senado un mandato y en noviembre perdió su intento de reelección. Chávez hace poco perdió en su intento por un asiento en el Senado en representación de Maryland. Al tiempo que ultimaba los nombramientos ministeriales, Bush también afinaba su primera iniciativa que enviará al Congreso y que se centrará en la educación.
Mineta ratificó sus convicciones demócratas y señaló que durante la contienda entre Bush y el vicepresidente Al Gore "orgullosamente le fui leal a mi partido". Pero resaltó que las elecciones son cosa del pasado y que lo que toca ahora es gobernar.
Chávez declaró que en su cargo se esforzará en ayudar a la clase trabajadora y que vigorosamente hará cumplir las normas gubernamentales contra la discriminación.
Bush no ocultó su satisfacción por la composición diversa de su gabinete. "No me amilana rodearme de gente preparada y competente", señaló Bush. Sobre la confirmación de sus nombramientos en el Senado, Bush expresó su esperanza de que "todas nuestras postulaciones no tendrán problema alguno".
Organismos defensores de los derechos civiles ya hicieron público sus planes de oponerse tenazmente a la confirmación del candidato a secretario de Justicia John Ashcroft.
El líder de los derechos civiles Jesse Jackson indicó que una coalición de sindicatos y activistas procurará descarrillar el nombramiento de Ashcroft, un ex senador perteneciente al ala conservadora del Partido Republicano.
Según Bush, Jackson "puede tratar de impedir todos los nombramientos que quiera", pero la decisión final corresponde a los senadores.