SAN SALVADOR.- El presidente salvadoreño, Francisco Flores, apeló anoche a la solidaridad nacional e internacional para afrontar los daños provocados por el terremoto que sacudió ayer al país y que ha dejado más de 100 muertos, centenares de heridos y mil desaparecidos.
El temblor, de 7,6 grados en la escala de Richter, se sintió durante unos 30 segundos a las 11.34 hora local (17.34 GMT) desde la costa sur de México hasta Costa Rica, y su epicentro fue localizado en la playa de Los Blancos, en la Costa del Sol, en el Pacífico Salvadoreño. El Salvador, con 5,6 millones de habitantes, ha sido el país más afectado por el temblor, que en Guatemala también causó dos muertos, uno de ellos una niña de dos años de edad, y causó heridas a otras ocho personas, mientras que en el resto de Centroamérica no se registraron víctimas ni daños materiales.
La magnitud del terremoto todavía no ha podido ser establecida con precisión aunque, según diversas fuentes, el número de muertos asciende a más de un centenar y el de heridos a casi trescientos, mientras más de un millar de personas están desaparecidas.Flores pidió a la comunidad internacional el envío de expertos en rescate y reparación de vías de comunicación, ya que unas 1.200 personas se encuentran desaparecidas entre los escombros de más de 800 casas, que quedaron enterradas por un alud de lodo en la colonia Colima, en el municipio de Santa Tecla, a unos 20 kilómetros de San Salvador.
Los cuerpos de socorro salvadoreños rescataron hoy entre los escombros en Colima los cuerpos sin vida de 36 personas, entre ellas varios niños.Según explicó a EFE Carlos Ivan Quintanilla, portavoz de la fiscalía general de la República, las labores de rescate en esa zona continuarán durante las próximas horas, a pesar de que la oscuridad nocturna dificulta las tareas. La situación en Colima es desoladora ya que incluso entre el personal que trabaja en las tareas de rescate hay poca esperanza de encontrar a muchas personas con vida.
En la mayoría de los hospitales de San Salvador y otras ciudades los enfermos han sido evacuados a lugares más seguros, ya que algunos edificios sufrieron importantes daños en sus estructuras.Las viviendas dañadas o destruidas en todo el país se cuentan por millares, mientras que muchos edificios estatales han sufrido daños, entre ellos el de la Asamblea Legislativa.
El aeropuerto internacional de Comalapa, en la capital salvadoreña, que ha sido cerrado al tráfico aéreo, aunque se espera su reapertura en las próximas horas, también ha sufrido algunos desperfectos. Las comunicaciones telefónicas fueron interrumpidas en varios sectores del país, incluso en la capital, así como el servicio de energía eléctrica y agua potable, aunque algunos de estos servicios fueron restaurados.
Los municipios más afectados por el terremoto han sido los de Santa Tecla y Comosagua, en el departamento de La Libertad, en el centro del país, así como el departamento de Usulután, en el oriente.