BOGOTA.- Representantes del gobierno y de la principal fuerza guerrillera de Colombia se reunieron este miércoles en un bastión rebelde, en otro esfuerzo por revivir el moribundo proceso de paz que busca poner fin al conflicto interno que desangra al país.
El encuentro fue ensombrecido por la matanza de al menos 25 campesinos en un caserío del norte del país, en un ataque atribuido por las autoridades a paramilitares de ultraderecha. El líder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), Manuel Marulanda "Tirofijo", confió en que el acercamiento con el gobierno del Presidente Andrés Pastrana permita reanudar el proceso de paz, abandonado por su guerrilla en noviembre como protesta por masacres cometidas por los paramilitares.
"Estamos trabajando para acercarnos en las diferencias y estudiar la posibilidad de reanudar la mesa de diálogo", dijo el veterano jefe rebelde en una entrevista publicada el miércoles por el semanario Voz.
"Están en marcha algunas iniciativas, encuentros y reuniones. Algo saldrá de ellos", agregó Marulanda, un iletrado campesino, al periódico del Partido Comunista Colombiano. La nueva ronda de acercamientos se realiza cerca del municipio de San Vicente del Caguán, en una zona desmilitarizada de 42.000 kilómetros cuadrados que sirve de escenario a las negociaciones y cuya condición vence el próximo 31 de enero.
Ese día Pastrana deberá anunciar si extiende por séptima vez desde noviembre de 1998 la zona desmilitarizada o si la cancela, lo que según analistas supondría una ruptura de las negociaciones y una intensificación del conflicto que cobró la vida de 35.000 civiles sólo en los últimos 10 años.
Gestiones opcadas por matanza paramilitar
"Estamos trabajando en el reinicio de los diálogos. Estamos buscando con las FARC alternativas para el relanzamiento del proceso que se está esperando", dijo el alto comisionado para la paz, Camilo Gómez, antes de viajar a la reunión. Las FARC suspendieron las negociaciones para presionar al gobierno a combatir a los ilegales escuadrones de ultraderecha, acusados de cometer la mayoría de matanzas en medio de su "guerra sucia" contra la guerrilla y sus simpatizantes.
La matanza a machetazos de al menos 25 campesinos cerca del pueblo de Ovejas y atribuida a paramilitares que incendiaron un caserío, es una de las peores de los últimos meses. La crisis en el proceso de paz se agravó en diciembre con el asesinato del presidente de la Comisión de Paz de la Cámara de Representantes, Diego Turbay, su madre y cinco personas más, que las Fuerzas Militares atribuyeron a las FARC.
Pero en su entrevista con Voz, Marulanda negó la autoría de las FARC en la muerte de Turbay y sus acompañantes. Pese a la crisis, las partes trabajan en un acuerdo humanitario que permita la liberación de hasta 20 policías y soldados capturados en combates por guerrilleros encarcelados.
Marulanda reiteró que tras el intercambio las FARC liberarán sin contrapartida a otro grupo indeterminado de policías y soldados, en un gesto que podría reanimar el proceso y llevar a Pastrana a prorrogar la zona desmilitarizada, según analistas. A la luz de esperanza en el proceso de paz con las FARC, se suma la posibilidad del inicio de una negociación con el Ejército de Liberación Nacional (ELN), la segunda fuerza rebelde del país, que anunció que liberará a siete policías.