BERLIN.- Tan pronto como tomó posesión de su cargo este jueves, la nueva ministra de Agricultura recibió una amonestación de la oposición relacionada con los planes del canciller Gerhard Schroeder de reorientar el sector ante el fallido manejo de la crisis por la enfermedad de las vacas locas.
Renate Kuenast, la nueve secretaria de estado, fue designada al cargo este mes luego que la crisis por la encefalopatía espongiforme bovina, o EEB, motivara la renuncia de dos ministros. Ella dijo al Parlamento que había ordenado a su cartera, la cual tiene ahora también facultades para la defensa del consumidor, delinear los pasos para combatir el mal de las vacas locas.
Algunas medidas incluyen un mejor control del alimento que consumen los animales y endurecer las penas a quienes violen los reglamentos. La EEB es una enfermedad que destruye el cerebro, y los científicos piensan que se ha extendido debido al reciclaje de carne y hueso de animales infectados, el cual regresa como alimento de ganado. El mal de las vacas locas ha sido vinculado a un padecimiento humano similar llamado enfermedad de Creutzfeldt-Jakob.
Schroeder también pidió a la industria agrícola alemana que enfoque su atención hacia el consumidor, y advirtió a los grupos agrícolas de presión que su influencia será atenuada. Ello ocasionó que la oposición acusara hoy al gobierno de abandonar a los granjeros.
Por otro lado, el comisionado de Agricultura de la Unión Europea, Franz Fischler, está en Berlín asistiendo a una convención anual de la industria. Se espera que Kuenast asista también a la convención.
