PARIS.- Un respetado sacerdote francés aseguró que tiene evidencias de que el hijo del difunto Presidente Francois Mitterrand se vio involucrado en ventas de armamento en Angola, informó hoy un diario.
El diario Le Figaro atribuyó a Abbe Pierre -sacerdote muy popular quien durante décadas ha trabajado en favor de los desposeídos- en el sentido que dos obispos congoleños le dijeron en 1996 que Jean Christophe Mitterrand había obtenido "enormes utilidades financieras de las ventas de armas en Angola".
Mitterrand, quien fue consejero sobre asuntos africanos durante la presidencia de su padre, entre 1986 y 1992, es investigado por tráfico de armas en Angola a comienzos de la década de 1990. Se sospecha que recibió 1,8 millones de dólares a través de una empresa francesa, los cuales habrían sido depositados en una cuenta en Suiza, en 1997 y 1998.
Según el artículo, Abbe Pierre señaló que los obispos hablaron con él poco después de la muerte del Presidente en 1996 "en su camino a Roma. Se detuvieron especialmente en París... para advertirme de asuntos muy graves". Los obispos mantenían estrechas relaciones con Mobutu Sese Seko, entonces el dictador de Zaire, que hoy se llama Congo.
"Según los obispos, Jean-Christophe Mitterrand vivía rodeado de lujos" a la sombra de Mobutu, según el religioso. "En particular, acusaron a Mitterrand de lograr enormes utilidades financieras con la venta de armas a Angola". El sacerdote, quien tiene más de 80 años, también sostuvo en el artículo periodístico que Angola revendía armas a Ruanda, donde el genocidio de 1994 costó la vida de 500.000.
El sacerdote dijo que sostuvo después una reunión secreta con Danielle Mitterrand, viuda del Presidente y madre de Jean-Christophe, para compartir la información con ella. "Conozco a mi hijo, tiene la conciencia limpia", fue su respuesta, según el diario.
Sin embargo, la señora Mitterrand negó tal conversación. "Nunca me habló de ventas de armamento o de actividades de Jean-Christophe en Africa, ni sobre los sacerdotes en el Congo", dijo a través de un portavoz, Jean-Pierre Versini-Campinchi, el abogado de su hijo, según la publicación.