WASHINGTON.- El flamante presidente de Estados Unidos, George W. Bush, emprendió el domingo su primera jornada en el cargo con un día de oración nacional y de acción de gracias, tras prepararse para una ambiciosa agenda de recorte de impuestos y reforma de la educación en las próximas semanas.
Bush, intentando sellar las heridas de la disputada batalla electoral, prometió el sábado en su discurso inaugural construir un "nación única de justicia y oportunidad".
El nuevo presidente tiene previsto asistir el domingo a un servicio religioso en la Catedral Nacional. Bush expresó su confianza en que su administración trabajará para aprobar algunas leyes, aunque el Congreso esté dividido.
"Estoy aquí para decir al país que se pueden hacer cosas", dijo tras asumir su cargo.La primera propuesta que Bush tiene previsto mandar al Congreso la próxima semana será su paquete de reforma en la educación, un área en la que demócratas y republicanos podrían trabajar juntos.
Mientras Bush se instalaba en su nuevo hogar, el ex presidente Bill Clinton abandonó Washington y se trasladó a Chappaqua, Nueva York, para iniciar su vida como ciudadano normal.
Poco después que Bush prestó juramento como el 43er presidente de Estados Unidos, el Senado confirmó los funcionarios clave de su gabinete como los secretarios de Estado, de Defensa y del Tesoro, así como otros cuatro cargos ministeriales.
Colin Powell fue confirmado como secretario de Estado mientras que Donald Rumsfeld fue aprobado como secretario de Defensa. El nuevo secretario del Tesoro es Paul O'Neill.
