PUERTO BAQUERIZO.- Casi todo el combustible que aún quedaba en los tanques del barco Jéssica, encallado en las islas Galápagos, cayó ayer al mar, informó Eliécer Cruz, director del Parque Nacional del archipiélago.
"Hemos tomado todas las precauciones para enfrentar esta situación, hemos regado dispersores en la zona y hemos establecido un cerco mayor con boyas flotantes para reducir el impacto ambiental", dijo Cruz a la agencia AP.
Aseguró que unas 35 personas realizaron un intenso trabajo, en medio de un fuerte oleaje, recogiendo manualmente el combustible desde pequeñas embarcaciones en las aguas de bahía Naufragio, en donde está encallado el barco.
De acuerdo con estimaciones oficiales, la cantidad que cayó al agua estaría entre 15.000 y 20.000 galones de diesel.
"Son cifras aproximadas porque no hay forma de medir con exactitud", explicó Cruz.
Este nuevo derrame se habría producido debido a que las fisuras en la estructura del barco aumentaron bruscamente de tamaño debido al fuerte oleaje que sacude a la nave, aseguró a AP un oficial de la armada que declinó ser identificado.
"Es una estructura vieja (el barco) que no aguanta mayores presiones por lo que creo que hasta puede partirse", añadió.
El 16 de enero el buque tanque ecuatoriano Jéssica encalló al frente de este puerto, de la isla San Cristóbal, cuando transportaba 243.000 galones de combustible.
El viernes empezó un derrame paulatino que totalizó más de 170.000 galones, mientras el resto fue recuperado desde lo tanques de almacenamiento del barco.
En tanto, un comunicado del Parque Nacional Galápagos precisó que manchas de combustible se han acercado a las vecinas islas Santa Cruz y Santa Fe. Temprano el ministro de Medio Ambiente, Rodolfo Rendón, dijo que los vientos y la corriente desviaron a la mancha hacia el noroeste, a mar abierto.
"Las especies animales están fuera de peligro", explicó Cruz a AP, aunque dijo que en Santa Fe fueron hallados seis lobos marinos con manchas de contaminación, a los cuales se les capturó y lavó con detergentes.
San Cristóbal es la tercera isla en importancia de este archipiélago ecuatoriano ubicado a 1.000 kilómetros de las costas de Ecuador.