BUCARETS.- El Ministerio de Agricultura y Alimentación de Rumanía ha pedido al Gobierno que establezca por decreto penas de cárcel de hasta 8 años para los importadores ilegales de carne de vacuno y productos derivados de países sometidos a embargo por las "vacas locas".
La decisión de endurecer las sanciones contra los que violan la ley sanitario-veterinaria fue tomada tras encontrarse en Rumanía importantes cantidades de conservas y productos que contienen carne de vaca de los países en que se han registrado casos de encefalopatía espongiforme bovina (EEB).
Dragos Corlateanu, director de la Agencia Nacional Sanitario-Veterinaria, subordinada al Ministerio de Agricultura, declaró hoy que el 95 por ciento de estas conservas -procedentes de los países europeos sometidos al embargo, entraron en Rumanía bajo la forma de donaciones humanitarias destinadas a orfanatos, asilos de ancianos y cantinas sociales.
"Rumanía no es el cubo de basura de Europa", dijo Corlateanu, tras mencionar que la mayoría de estos productos tienen las fechas de caducidad expiradas o a punto de expirar.
Todos estos productos fueron decomisados antes de efectuarse los análisis y decidirse qué se hará con ellos, preciso el director.