BELGRADO.- El gobierno prodemocrático serbio puede perder el respaldo financiero y político estadounidense a menos que demuestre evidencias sólidas de cooperación con el tribunal para crímenes de guerra de La Haya, que acusa a Slobodan Milosevic, dijo hoy el primer ministro de la principal república yugoslava.
Zoran Djindjic habló a la prensa aquí, al volver de un viaje a Washington, donde mantuvo conversaciones con el secretario de Estado norteamericano Colin Powell.
El primer ministro citó la fecha límite del 31 de marzo, señalada por el Congreso estadounidense, y dijo que a menos que Yugoslavia muestre su cooperación con el tribunal de la ONU para entonces, "Estados Unidos, las delegaciones de todas las instituciones internacionales, incluido el Banco Mundial, (y) el Fondo Monetario Internacional, votarán contra nuestros intereses".
Estados Unidos ha destinado un fondo de ayuda de 100 millones de dólares para Yugoslavia. Pero la porción aún no utilizada del dinero podría no entregarse a la nación si se percibe reticencia para cooperar en la extradición y juicio de sospechosos, incluido el ex presidente Milosevic, acusado de posible participación en las atrocidades perpetradas durante la campaña de sus fuerzas contra albaneses kosovares, en 1998 y 1999.
El nuevo gobierno se ha resistido a la idea de una extradición expedita, e insiste en que Milosevic sea procesado en su país por los actos ilegales cometidos durante 13 años de gobierno.
Djindjic sugirió que Powell comprendió los argumentos para un juicio de Milosevic en Serbia y comentó "Mi impresión es que hemos asegurado un entendimiento en el Departamento de Estado".
