BUENOS AIRES.- El gobierno argentino convocó a su embajador en Cuba y expresó su "malestar" por las críticas que hizo el Presidente Fidel Castro a las que calificó de ofensivas.
"(Las palabras de Castro) son una ofensa no sólo para el gobierno, sino para todo el pueblo argentino", dijo el canciller Adalberto Rodríguez Giavarini. El funcionario manifestó, en declaraciones desde Washington donde este lunes se reunirá con el nuevo secretario de Estado norteamericano, Colin Powell, que llamó al embajador argentino en La Habana, Oscar Torres Abalos.
Castro dijo el sábado que Argentina "lame la bota yanqui", por cuanto habría anticipado que votará a favor de una condena a Cuba en las Naciones Unidas por la política de derechos humanos del gobierno cubano, como lo hizo el año anterior. Rodríguez Giavarini dijo que los comentarios de Castro "han producido un profundo desagrado" y explicó que a su regreso recibirá un informe de Torres Abalos sobre el estado de las relaciones bilaterales con Cuba.
Castro, en un discurso al cierre de un foro económico, indicó que las autoridades argentinas anunciaban su decisión de votar en la ONU contra Cuba en respuesta al "susto" por el rumbo de su economía y tras el auxilio financiero que recibieron en diciembre de instituciones internacionales, con el apoyo de Washington.
Argentina "lame la bota de los yanquis", afirmó el Presidente cubano en el discurso. Bajo el neoliberalismo económico "no es posible para el gobierno (argentino) sostener ni la vergüenza, ni el pundonor", añadió el máximo dirigente.
El embajador Rodríguez Giavarini dijo a las agencias locales de noticias que Argentina no adelantó aún su posición con respecto a la situación de los derechos humanos en Cuba y manifestó que Castro estaba "desinformado o mal informado".