BUENOS AIRES.- El organismo humanitario Abuelas de Plaza de Mayo encontró el nieto de Rosa Roisinblit, vicepresidenta de la agrupación, hijo de su hija desaparecida, apropiado por un matrimonio civil durante la dictadura (1976/83), informó este jueves la propia dirigente.
En declaraciones al canal de cable TN, Roisinblit dijo que "no hay ninguna duda" sobre la relación familiar entre ella y este "ahora joven de 22 años", de acuerdo a los resultados de las pruebas de ADN que se realizaron en un banco genético en Seattle, Estados Unidos, que dieron una compatibilidad de más del 99,90%, señaló.
La dirigente de Abuelas confirmó que este es el nieto número 70 que logra ubicar el organismo humanitario, dedicado desde 1977 a buscar a los menores sustraídos durante la dictadura, hijos de desaparecidos.
Roisinblit explicó que "han pasado unos cuantos meses desde que yo sé que encontré a mi nieto" pero, dijo, recién ahora fue citado el apropiador a los Tribunales, por lo que se dio a conocer la noticia.
La jueza María Servini de Cubría, a cargo de una de las causas judiciales sobre el robo de bebés en la dictadura confirmó la localización del joven, después de una larga investigación, que habría sido apropiado por un empleado civil de la Fuerza Aérea y su esposa.
Según trascendió, se trata del matrimonio integrado por Francisco Gómez y Teodora Jofré.
El joven nació durante el cautiverio de Patricia Julia Roisinblit, su madre desaparecida, quien estaba embarazada de 8 meses cuando fue secuestrada en el marco de la represión ilegal, junto a su marido José Manuel Pérez Rojo, el 6 de octubre de 1978.
Según sobrevivientes que compartieron su cautiverio, la mujer dio a luz el 15 de noviembre de 1978 en el campo de concentración que funcionaba en la Escuela de Mecánica de la Armada (ESMA).
Rosa Roisinblit tiene otra nieta, Mariana, de 23 años, que tenía 15 meses cuando sus padres fueron secuestrados y que participó intensamente en la búsqueda de su hermano.
El joven "tenía una sospecha muy leve pero nada específico (sobre su origen). Pero cuando se encontró con Mariana y se miraron, se reconocieron, esa es la pura verdad. Se vieron parecidos", afirmó emocionada la vicepresidenta de Abuelas.
Recordó que en junio de 2000, cuando se enteró de la confirmación del parentezco, sintió "una emoción muy grande, no sabía si reír, llorar, gritar: hice todo al mismo tiempo".
"Desde entonces tuvimos varios encuentros, hablamos por teléfono. Pero para él es un shock muy grande descubrir que los que creía sus padres resultaron ser simplemente ladrones. A él lo robaron. Ellos son apropiadores", expresó.
Si bien no quiso dar datos de identidad de su nieto, "para preservarlo un poco", afirmó que "ahora es un hombre de 22 años. El actuó de motus propio, quiso saber si era realmente hermano de Mariana, mi nieta que hoy tiene 23 años. El tuvo interés en saber y se ofreció a hacer el análisis de sangre", detalló.
"Como vicepresidenta de la institución, fui testigo de casi todas la localizaciones. Este es el nieto número 70 que encontramos y me ha tocado a mí. Soy una privilegiada", manifestó.
Abuelas tiene registradas 240 denuncias de búsqueda de menores desaparecidos, pero estima que podrían ser 500 los niños robados en la represión ilegal.
