MADRID.- La infraestructura de ETA en el País Vasco recibió hoy un duro golpe con la detención de 15 personas, horas después del atentado con coche-bomba en San Sebastián que costó la vida a dos trabajadores, enterrados en las últimas horas.
Varios de los detenidos son miembros del "comando Donosti", uno de los más activos de ETA, con 19 atentados y 7 asesinatos desde que la banda armada rompió en diciembre de 1999 un alto el fuego de 15 meses (periodo con 26 personas asesinadas en España).
Así lo confirmó el consejero de Interior del Gobierno regional vasco, Javier Balza, quien informó de que las detenciones se produjeron en distintas localidades de la provincia de Guipúzcoa, en el marco de una operación policial que sigue abierta.
Balza explicó que la actuación de la Ertzaintza (policía regional vasca) es fruto de "una investigación previa" al atentado de ayer y que se puso en marcha al entender que la pasada madrugada era el mejor momento -"como se ha demostrado"- para ejecutarla.
El consejero no precisó si alguno de los arrestados está relacionado con la explosión del coche-bomba que ayer mató a José Angel Santos y Josu Leonet cuando se dirigían a su trabajo, en un atentado que iba dirigido contra el edil socialista Iñaki Dubreuil.
Otras cuatro personas -entre ellas Dubreuil- resultaron heridas a consecuencia de ese atentado, dos de los cuales, Igor Larrea y José Ignacio Urrestarazu, siguen ingresadas en estado muy grave.
En un principio se informó de que las detenciones de las últimas horas tenían que ver con el atentado con bombas cometido anoche contra un centro de menores de en la localidad de Zumárraga, extremo que fue posteriormente desmentido por el Ejecutivo vasco.
Este golpe a ETA sucedió en pocas horas a la detención en Francia del jefe del "aparato militar" de ETA, Javier García Gaztelu, alias Txapote, el hombre "que decidía quién iba a vivir y quién no", en palabras del delegado del Gobierno en el País Vasco, Enrique Villar.
El ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, felicitó a la policía francesa por la detención "Txapote", auguró que "el día de ayer tendrá una marcada influencia en el futuro" y subrayó la "brutalidad y precipitación" con la que actúa ETA últimamente.
"No es nuevo tras la tregua, pero ayer esa precipitación y brutalidad, esa manera chapucera y brutal de actuar casi marcan un récord", dijo el ministro, quien se refirió a la ETA de hoy como "una organización básicamente descontrolada".
Mayor Oreja dijo que la caída de "Txapote", tras las detenciones en los pasados dos años de su antecesor, José Javier Arizkuren Ruiz, y el considerado "número 1" de ETA, Iñaki de Rentería, "significa que los periodos y ciclos de ETA se acortan y se abrevian".
"Nada es casual. No lo han sido las detenciones de ayer y tampoco lo es el descontrol de ETA. Son tendencias irreversibles", añadió el titular de Interior, quien, no obstante, evitó el triunfalismo y advirtió de que "no estamos en el final" del terrorismo en España.
En repulsa al último atentado etarra, miles de personas se sumaron al mediodía de hoy a las concentraciones silenciosas convocadas frente a los ayuntamientos de todo el país.
Para esta tarde (19.30 GMT), todos los partidos vascos (a excepción de Euskal Herritarrok, brazo político de ETA) han convocado una manifestación en la ciudad vasca de San Sebastián.
Bajo el lema "Paz y Libertad, ETA no", los ciudadanos pedirán a ETA que ponga fin a una campaña de terror que se ha cobrado 26 muertos desde que la banda retomó las armas en diciembre de 1999, tras un alto el fuego de 15 meses, y más de 800 desde que el grupo armado fue fundado en la década de los años 60.