LA HABANA.- La policía cubana detuvo este viernes a algunos de los más conocidos disidentes de la isla y evitó que otros mantuvieran un encuentro en una casa particular, dijeron fuentes de la disidencia.
Elizardo Sánchez, presidente de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional, dijo a Reuters que fue llevado de su casa a una estación de policía cercana, donde le hicieron una advertencia oficial.
"Hablaron de que yo estaba alentando actos subversivos apoyados y pagados por el imperialismo yanqui", dijo, añadiendo que se negó a firmar la advertencia y fue liberado dos horas después.
Sánchez y otro disidente moderado, Osvaldo Alfonso Valdés, del Partido Liberal Democrático de Cuba, dijeron que policías y agentes de la seguridad del estado rodearon una casa de La Habana donde varios disidentes tenían previsto encontrarse.
La reunión, a la que estaban invitados varias decenas de disidentes, no se produjo. Otro conocido disidente, Héctor Palacios, fue llevado de su casa por la policía, probablemente también para recibir un aviso oficial, dijo Sánchez.
El gobierno de Fidel Castro, que nunca comenta estas detenciones, considera a los disidentes como contrarrevolucionarios financiados por Estados Unidos.
Sánchez, un veterano disidente que pasó tiempo en la cárcel, señaló que estas detenciones parecían indicar un endurecimiento de las autoridades en relación con las actividades de la oposición, incluso si se celebran en casas privadas.
En el sistema unipartidista socialista que gobierna la isla desde la revolución de 1959, sólo está legalizado el gobernante Partido Comunista.
En una mesa redonda televisada en la tarde del viernes, el presidente de la Asamblea Nacional, Ricardo Alarcón, defendió la democracia cubana, afirmando que es un modelo más democrático que el occidental.
"Fortalecer nuestro socialismo es lo mismo que fortalecer nuestra democracia", dijo Alarcón. "Sin haber alcanzado la perfección, vivimos en el país en el que más se ha hecho ... por el ejercicio cabal de la libertad", añadió.