MINA, Arabia Saudí.- Una estampida entre la multitud que participa en la peregrinación musulmana anual dejó este lunes 35 muertos, informó la agencia noticiosa oficial saudí.
La agencia dijo que 23 mujeres y 12 hombres murieron durante la simbólica pedrea del demonio. Agregó que hubo un número no precisado de heridos.
La seguridad durante la multitudinaria peregrinación ha sido de particular preocupación, puesto que casi dos millones de musulmanes de todo el mundo participan en el "haj", la peregrinación que ha sido una fuente de tragedias en el pasado.
Una estampida en 1998 dejó 180 muertos. Un incendio en 1997 en Mina, la ciudad donde se lleva a cabo la pedrea, abrasó numerosas carpas levantadas en un descampado y dejó más de 340 muertos y 1.500 heridos. En 1994, otra estampida mató a 270 peregrinos. La tragedia más mortífera fue una estampida en 1990 en la que murieron 1.426 peregrinos.
Los peregrinos vienen desde La Meca hasta Mina para arrojar guijarros pequeños a tres columnas de piedra que simbolizan el demonio, mientras entonan el lema "En el nombre de Dios, Dios es grande".
Los pilares que representan el demonio se alzan en el centro de rampas gigantescas construidas para permitir el desplazamiento de las nutridas multitudes que deben completar el ritual antes del anochecer. Según la tradición musulmana, fue el lugar donde el demonio intentó tentar al profeta Abraham para que desobedeciera a Dios negándose a sacrificar a su hijo, una leyenda común para el Islam, el cristianismo y el judaísmo.
Según la tradición, Dios ordenó a Abraham que sacrificase una oveja en vez de su hijo, y los musulmanes sacrifican camellos y ganado para celebrar el festival de los sacrificios, Eid al-Adha.
Una vez que completan el ritual de la pedrea, los peregrinos se afeitan o se recortan los cabellos y luego sacrifican más de medio millón de camellos, vacas y ovejas cerca de Mina.
El "haj" llegó ayer a su culminación con las plegarias en el Monte Arafat, una colina en las afueras de La Meca donde el profeta Mahoma pronunció su último sermón en el año 632.