NUEVA YORK.- El padre biológico de las mellizas que fueron adoptadas dos veces a través de la Internet, primero por unos estadounidenses y luego por unos británicos, dijo este lunes que ha cambiado de parecer y ahora quiere quedarse con las pequeñas.
Aaron Wecker ha pedido formalmente la custodia de las niñas, de cuya adopción dijo que estuvo oportunamente enterado el año pasado.
Wecker reconoció que tuvo un problema de drogas, pero aseguró que ya los ha superado y está en perfectas condiciones. Las ahora llamadas "mellizas de Internet", que nacieron el 26 de junio de 2000, fueron adoptadas primero a cambio de 6.000 dólares por una pareja de californianos mediante una agencia "online", que luego dio en adopción a las mismas niñas, por 12.000 dólares, a una pareja británica.
El padre biológico dijo que él sabía que la madre de las pequeñas, Tranda Wecker, de San Luis, Missouri, había decidido dar a las niñas en adopción, pero que él no intervino en el proceso. "Dejé eso en manos de la mamá", dijo Aaron en el programa The Early Show de la cadena de televisión CBS.
"Tranda y yo estábamos separados. Ya teníamos una niña y pensamos entonces que lo mejor para las mellizas era encontrarles una familia que las críe juntas", relató. Pero ahora Aaron Wecker quiere quedarse con las niñas.
"Tengo un trabajo estable, tengo una casa, con mucho espacio, en un bonito ambiente rural. Me gustaría llevar a las niñas a casa conmigo, pienso que es lo mejor para ellas", dijo.
Los padres naturales forcejean con las parejas de padres adoptivos por la custodia de las niñas, quienes están en Gran Bretaña bajo el cuidado de los servicios sociales.
La semana pasada, un juez de San Luis ordenó que las mellizas sean llevadas de vuelta a Missouri, donde debería tomarse la decisión judicial final sobre la custodia.
En otro capítulo del drama de la adopción, el padre adoptivo californiano de las mellizas fue acusado el pasado viernes de acoso sexual a dos adolescentes que trabajaron en su casa como niñeras. Richard Allen, quien con su esposa Vickie tuvo a las niñas durante dos meses antes de que las pequeñas fueran a parar a manos de los británicos Alan y Judith Kilshaw, dijo en una entrevista separada por la televisión que los cargos de acoso sexual eran falsos.
"No soy un acosador de niñas. Estoy golpeado y consternado por estas cosas que están pasando. Sólo quiero asegurar a todos que esto es algo que yo nunca haría", afirmó Allen en el programa Good Morning America de la cadena de televisión ABC.