BUJANOVAC (Yugoslavia).- El enviado de la OTAN para el conflictivo sudeste de Serbia, Pieter Feith, y el vicepresidente del Gobierno serbio, Nebojsa Covic, trataron hoy sobre la situación tras la negativa de los guerrilleros albaneses a firmar un alto el fuego con las autoridades serbias.
"Continuamos los esfuerzos para lograr el alto el fuego, y espero que lleguemos a un acuerdo. Creo que hay que tener paciencia", declaró Feith tras la reunión con Covic.
El alto el fuego es una condición para que puedan comenzar las negociaciones entre serbios y albaneses sobre una solución a la crisis del sudeste de Serbia, que abarca la zona de seguridad en torno a Kosovo en la que actúa la guerrilla separatista albanesa.
Los guerrilleros se negaron anoche a firmar el documento en una reunión con Feith en su baluarte de Konculj, situado en la desmilitarizada zona de seguridad de cinco kilómetros de ancho establecida en torno a Kosovo en junio de 1999.
Feith no volverá a viajar hoy a Konculj, como se había anunciado anteriormente.
"Las conversaciones continuarán durante la próxima semana, cuando estén preparados para los nuevos contactos", indicó Feith.
Al comentar si los guerrilleros ven como un obstáculo para el alto el fuego la autorización que la OTAN dio a las fuerzas yugoslavas para que retornen a una parte de la zona de seguridad, Feith manifestó que ese es uno entre otros muchos problemas, pero no dio más detalles.
La OTAN autorizó el pasado jueves el despliegue de las fuerzas yugoslavas en una pequeña parte de la zona de seguridad que linda con la Antigua República Yugoslava de Macedonia (ARYM), país en el que también actúa una guerrilla separatista albanesa en el norte limítrofe con Kosovo.