WASHINGTON, Mar 13 (AFP)- El Presidente George W. Bush afirmó su intención de mantener la presencia de las fuerzas norteamericanas en Corea a su nivel actual.
El despliegue de 37.000 militares norteamericanos en la península de Corea es "un elemento necesario para mantener la paz y queremos respetar este compromiso. Es lo que dije al presidente surcoreano cuando estaba aquí el otro día", declaró Bush en una entrevista acordada la noche del martes a diarios regionales norteamericanos.
Añadió que Estados Unidos quería mantenerse activo en el mundo y no aislarse.
El presidente había recibido a su homólogo surcoreano Kim Dae-Jung la semana pasada en la Casa Blanca para discutir acerca de la situación en la penínusla y analizar las relaciones con Corea del Norte.
Bush había afirmado su profunda desconfianza con respecto a Pyongyang e indicó que no encaraba una reanudación inmediata de las discusiones norteamericano-norcoreanas, sobre todo acerca de los asuntos balísticos.
El martes, Pyongyang anuló a último momento discusiones de cuatro días previstas a nivel ministerial con Corea del Sur, sin dar una razón para justificar esta anulación.
Los analistas estimaron que la actitud de firmeza preconizada por Estados Unidos con respecto a Pyongyang estaba vinculada a la indignación de Corea del Norte, una hipótesis que el departamento de Estado calificó de "pura especulación".