BRASILIA.- Dos mil agricultores ingresaron violentamente el miércoles al edificio del Ministerio de Minas y Energía para exigir soluciones a sus problemas.
Los manifestantes rompieron vidrios del edificio, y se produjeron enfrentamientos entre los guardias y los agricultores resultando algunos heridos a consecuencia de la gresca.
Un batallón de operaciones especiales de la policía intervino y desalojó a los manifestantes.
Los agricultores están demandando reivindicaciones relacionadas principalmente con el pago de indemnizaciones por la pérdida de sus tierras a consecuencia de la construcción de represas y plantas hidroeléctricas.
El incidente se registró en el primer día de funciones al frente de ese Ministerio del senador Luis Jorge Vasconcelos, quien sustituyó en el cargo a Rodolpho Tourinho.
Elio Meca, coordinador del movimiento, que representa a aproximadamente un millón de trabajadores rurales, dijo a la AP por teléfono que la protesta se produce ante la falta de soluciones a sus problemas.
"Miles de agricultores perdimos nuestras tierras a consecuencia de la construcción de represas y plantas hidroeléctricas, a los que podrían sumarse más aún", explicó.
Agregó que esas plantas hidroeléctricas "sirven en la actualidad al sector privado y no así a los trabajadores rurales".
Señaló que el objetivo es que el gobierno "democratice la política energética y la implementación de alternativas de energía a las que tengan acceso los agricultores a bajos precios".
Las protestas se realizaron en el Ministerio de Minas y Energía y frente a las oficinas del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) que financia la construcción de grandes represas hidroeléctricas.
Meca dijo que los agricultores no se oponen al desarrollo, pero sí a la realización de obras que perjudican el medio ambiente y sus tierras.
Señaló que el sector exige al ejecutivo la aprobación de un programa financiado con líneas de crédito subsidiado para el desarrollo y la recuperación de las tierras afectadas.