TOKIO.- Los japoneses, hartos de la mala situación económica y política por la que atraviesan, podrían ser perdonados por pensar que el cielo está a punto de caerles encima y en realidad, la próxima semana podría ser así. El gobierno dijo el viernes que aconsejará a los ciudadanos de algunas zonas del país que permanezcan bajo techo durante 40 minutos cuando la estación espacial rusa Mir caiga a la Tierra. Japón se encuentra en la trayectoria de vuelo de la estación, de 15 años de antiguedad, que se espera caiga a unos 3.000 kilómetros al este de Nueva Zelanda en el mar abierto hacia el 20 de marzo. "A partir de los cálculos hechos para el día anterior a la caída prevista, tenemos pensado dar instrucciones a los gobiernos locales, incluida la policía, para que estén preparados", dijo un funcionario del Consejo de Prevención de Riesgos. El funcionario dijo que la Mir sólo tardaría 40 minutos en atravesar los 200 kilómetros de cielo japonés que se espera que sobrevuele. El gobierno anunciará más consejos y advertencias el lunes, cuando los científicos tengan una idea más aproximada de la trayectoria del vuelo de la estación espacial. "Aunque las posibilidades de que caigan objetos son bajas, aconsejaremos a los ciudadanos que como precaución se queden bajo techo en la medida de lo posible", dijo el funcionario. Rusia ha asegurado que la nave no caerá en zonas pobladas. Se espera que vuele sobre Japón y zonas de Australia antes de caer al Pac fico entre Nueva Zelanda y Chile. Pero Japón, junto a Nueva Zelanda y Australia, ha mantenido sus cautelas. El martes, el director de la Agencia de Defensa, Toshitsugu Saito, aplazó una visita a Washington para reunirse con el secretario de Defensa, Donald Rumsfeld, ante un posible problema en el aterrizaje de la Mir. Los titulares de los tabloides locales han puesto de manifiesto los temores en las últimas semanas de que trozos de la Mir puedan caer en Japón. El jefe de la Secretaría del Gabinete, Yasuo Fukuda, dijo que Japón confiaba en que todos los trozos de la estación espacial caigan en forma segura en el Océano Pacífico, pero añadió que el gobierno estaba preparado ante posibles situaciones de emergencia inesperadas.