MACAE, Brasil.- La posibilidad de que se hunda la plataforma petrolera marítima más grande del mundo, destruida por tres explosiones que podrían haber dejado 10 muertos, disminuyó este viernes, aunque su base se inclinaba hacia el mar, dijeron técnicos de la empresa brasileña Petrobras.
Funcionarios de Petrobras, propietaria de la plataforma P-36, ubicada 125 kilómetros mar adentro del litoral de Río de Janeiro, dijeron que la plataforma posiblemente no se hundiría, luego de que las explosiones la llevaron a una inclinación de 30 grados.
"La plataforma está estable por ahora", dijo un portavoz de Petrobras. "Estamos estudiando la posibilidad de enviar un equipo a la plataforma para buscar a los hombres desaparecidos y estudiar cómo salvar la base".
Las tareas de rescate de nueve trabajadores desaparecidos fueron suspendidas la noche del jueves debido a la oscuridad y las fuertes mareas. Un trabajador fue encontrado muerto y otro está hospitalizado con quemaduras graves tras las explosiones, cuya causa aún se desconoce.
La plataforma, con la altura de un edificio de 40 pisos, tiene 1,5 millones de litros de petróleo crudo en sus ductos, además de 1,2 millones de litros de combustible diesel en sus tanques para mantener operativa la planta.
Petrobras reconoció que los buques cisterna que envió al lugar del accidente sólo tendrían capacidad para contener 50 por ciento de los hidrocarburos en los tanques, lo que despertó temores de un accidente ambiental en caso de hundimiento.
Las imágenes de la plataforma, inclinada sobre el mar como la italiana Torre de Pisa, conmovieron el viernes a los brasileños al aparecer en las primeras páginas de los diarios y en los noticieros de televisión, ante la posibilidad de graves consecuencias ambientales en caso de un derrame de hidrocarburos.
Un ingeniero de la empresa dijo a una radio local que, si bien los tanques de almacenamiento bajo la plataforma estaban cerrados, existe el riesgo de que las compuertas se dañen en caso de un eventual hundimiento.
"Si aumenta el grado de inclinación, vamos a perder la plataforma", admitió el jueves el presidente de Petrobras, Henri Philippe Reichstul, en una videoconferencia.
Protestas de petroleros
Los trabajadores del sector petrolero anunciaron protestas por las malas condiciones de seguridad en Petrobras, con manifestaciones previstas para este viernes frente a las sedes de la empresa en todo el país.
Entre tanto, los familiares de los trabajadores desaparecidos se mantenían a la espera de los resultados de las tareas de rescate en la Cuenca de Campos, la principal región petrolera de Brasil. "Petrobras está más preocupada por reducir gastos que en la seguridad de sus trabajadores y el ambiente", dijo Jandira Feghali, una diputada comunista que se reunió con los trabajadores tras la explosión.
La Federación Unica de los Petroleros denunció que más de 80 trabajadores del sector han muerto en accidentes durante los últimos tres años.
La plataforma P-36 tiene capacidad de producir hasta 180.000 barriles de crudo por día, lo que la convertiría en la mayor plataforma marítima del mundo, aunque sólo estaba extrayendo 80.000 barriles por día desde que inició operaciones en 2000.
Petrobras calculó que podría sufrir pérdidas de 50 millones de dólares mensuales por la salida de funciones de la planta.
Las acciones de la empresa cayeron 6,8 por ciento, y la moneda brasileña, el real, se debilitó el jueves ante preocupación de los inversores por las consecuencias que el accidente tendría para Petrobras.