BUENOS AIRES.- El Presidente Fernando de la Rúa se reunió el lunes por la noche con colaboradores en un intento por cerrar la reorganización de su resquebrajado gabinete al cual se incorporará el economista Domingo Cavallo.
Pero De la Rúa, quien estuvo en Santiago de Chile esta mañana, encontraba fuerte resistencia en su propio partido Unión Cívica Radical (UCR) y el Frente del País Solidario (FREPASO), como también del peronismo opositor, al llamado que hizo el domingo para un gobierno de unidad nacional.
La UCR y el FREPASO, al igual que el peronismo, dijeron que estaban dispuestos al diálogo pero con la previa condición de eliminar gran parte del drástico plan de ajuste que anunció el viernes el ministro de Economía, Ricardo López Murphy.
Asimismo, los diputados y senadores peronistas dijeron que no le darían al Presidente facultades especiales para gobernar al margen del Congreso, una condición que habría reclamado Cavallo que ocuparía la jefatura de Gabinete.
El ex vicepresidente Carlos Alvarez, líder del FREPASO el socio minoritario de la Alianza, apoyó el ingreso de Cavallo, pero pidió la revisión de las medidas de ajuste, especialmente en el sector de la educación.
En igual sentido, se pronunciaron la UCR y el peronismo.
De la Rúa dijo hoy en Chile que Cavallo se incorporará al gabinete pero no aclaró en que puesto, y manifestó que López Murphy sigue en el cargo.
El Presidente estaba reunido esta noche con Cavallo en la residencia suburbana de Olivos, y una versión también dijo que participaba del encuentro el ministro de Economía.
La invitación a Cavallo formó parte del intento presidencial por resolver la grave crisis política planteada el 16 de marzo, a raíz del generalizado rechazo a un paquete de medidas anunciadas por López Murphy.
El ministro anunció un plan de austeridad basado en recortes de los presupuestos de la educación pública, las universidades estatales y algunos beneficios sociales.
De inmediato renunciaron tres ministros y una decena de altos funcionarios y colocaron al borde de la fractura a la coalición oficialista Alianza, al tiempo que sindicatos obreros y organizaciones estudiantiles anunciaban huelgas y demostraciones de protesta.
Cavallo reúne, aparentemente, dos valiosas condiciones: goza de la confianza de los mercados y de los organismos internacionales de crédito, con los que la Argentina está altamente endeudada. Y también se le reconoce capacidad para buscar algunos cursos alternativos a los duros programas "ultraliberales" que respalda López Murphy, muy cuestionados por la coalición oficialista y por la oposición peronista.
Antes de partir rumbo a Santiago, De la Rúa dijo que la permanencia de López Murphy estaba ratificada, pero en los medios políticos y económicos subsistían fuertes dudas de su continuidad.
Roque Fernández, quien sucedió a Cavallo en la cartera de Economía en 1996, cuando el ex Presidente Carlos Menem lo obligó a renunciar, dijo el lunes que "por sus diferentes concepciones sobre lo que debe hacerse hoy en materia económica, Cavallo y López Murphy son totalmente incompatibles".
La idea predominante en la UCR y el FREPASO parecía ser favorable a la presencia de Cavallo, aunque condicionada a que se modifiquen las medidas de López Murphy y de que el ministro abandone su cargo.
"Nosotros vamos a colaborar con el Presidente en esta etapa de crisis, siempre que haya cambios en la orientación económica", dijo Alvarez.
"Hay que poner énfasis en el crecimiento y la producción. La salida no son estas medidas. Este plan choca con el sentido común de la sociedad y genera enormes conflictos sociales", enfatizó el ex vicepresidente.
El ex Presidente Raúl Alfonsín, titular de la UCR, hizo saber a través de uno de sus portavoces, Raúl Alconada Sempé, que la coalición Alianza subsiste, "pero distante del gobierno".
"Se pretende que se dé un cheque en blanco a Cavallo pero en democracia no se puede dar un cheque en blanco a nadie", agregó. Dijo también que la posición de la UCR quedará fijada "cuando conozcamos los contenidos de la política que quiere impulsar".