WASHINGTON.- Israel y los palestinos discreparon este martes sobre los términos para reanudar las conversaciones de paz, antes de la primera reunión del Primer Ministro israelí, Ariel Sharon, y el Presidente de Estados Unidos, George W. Bush, desde que ambos llegaron al poder.
Las tensiones también parecían a punto de agravarse luego que las autoridades israelíes en Jerusalén dieron la aprobación inicial para la construcción de casi 3.000 viviendas en un asentamiento judío al borde de la ciudad, que desde hace mucho tiempo ha sido una fuente de fricción entre las partes.
Al pedírsele que mencione qué le gustaría más a Israel ver de parte del nuevo líder estadounidense, el asesor de Sharon, Dore Gold, dijo en Washington a la cadena estadounidense de televisión por cable, C-Span:
"Lo primordial y más importante es que (el líder palestino) Yasser Arafat comprenda un mensaje extremadamente claro: que con la violencia no ganará nada y que su adopción de la violencia en realidad lo está haciendo retroceder".
Sharon, de quien se espera enfrente presiones de Bush en las conversaciones de este martes para que relaje las drásticas medidas impuestas a los palestinos durante casi seis meses de confrontaciones, dijo en el primer día de su visita a Estados Unidos que desea la reanudación de las conversaciones de paz.
"Creo que Israel puede llegar a un acuerdo con los palestinos y yo haré todos los esfuerzos para alcanzar ese acuerdo", dijo Sharon al Comité de Asuntos Públicos Estadounidense-Israelí (AIPAC) el lunes por la noche.
Pero Sharon desea que haya conversaciones de paz sólo si cesa la violencia y dice que desestimará las iniciativas de paz formuladas por su antecesor, Ehud Barak, de quien se cree fue mucho más decidido que cualquier otro líder israelí en la historia en un intento de concretar un acuerdo con los palestinos.
El gobierno de Bush ha dicho que considera nulas en su totalidad las ideas de paz que propuso en su oportunidad el ahora ex Presidente Bill Clinton. Pero los palestinos reiteraron el martes que las ofertas hechas por el anterior gobierno deben de ser la base de cualquier conversación de paz e instaron, de nuevo, al despliegue de una fuerza de protección internacional.
"Yo digo que sí, hay una salida, que sólo puede lograrse con la llegada de fuerzas internacionales para proteger al pueblo palestino y (...) un retorno a las negociaciones a partir del punto donde se suspendieron", dijo el ministro de Información palestinos, Yasser Abed Rabbo.
Las conversaciones de paz han estado estancadas durante meses y la falta de progreso contribuyó a hacer estallar la insurrección popular palestina contra la ocupación israelí de Cisjordania y la Franja de Gaza y la violencia que ha dejado las muertes de por lo menos 347 palestinos, 66 israelíes y 13 árabes israelíes.
En tanto, el ministro de gabinete palestino Hassan Asfour criticó la promesa de Sharon de detener la violencia antes de reanudar las conversaciones, una posición que lo llevó a ganar las elecciones de febrero.
"Desde que Sharon fue electo, se ha salido del camino político y el peligro es que él esté preparando el camino para una confrontación militar, para la guerra", dijo Adfour a Reuters. En el más reciente episodio de violencia, un muchacho palestino de 13 años fue herido de un balazo cuando un colono judío disparó a jóvenes en la zona sur de la ciudad cisjordana de Nablus, dijeron testigos palestinos.
Un portavoz de la policía israelí en Cisjordania dijo que se estaba investigando el incidente. Un colono judío también fue herido de bala en una pierna por palestinos armados, mientras se dirigía en su vehículo hacia Nablus, agregó.