WASHINGTON.- El presidente George W. Bush dijo el jueves que ordenar la expulsión de 51 rusos del país, incluyendo a cuatro funcionarios de inteligencia acusados de relaciones con un presunto espía, "fue lo correcto".
"Me presentaron los hechos. Yo tomé la decisión. Fue lo correcto", señaló Bush.
Otros dos funcionarios rusos de quienes se sospecha están involucrados en el explosivo caso del ex agente del FBI acusado de espionaje para Rusia, Robert Hanssen, salieron del país recientemente cuando los investigadores determinaron su posible relación, dijo un funcionario estadounidense de alto nivel.
En una medida paralela, 46 rusos acreditados en su embajada en Washington y en consulados en todo Estados Unidos, abandonarán Estados Unidos el 1 de julio. La expulsión refleja el enojo que provocó aquí, que Rusia mantuviera un gran contingente de funcionarios de inteligencia en Estados Unidos, el mismo que empezó a aumentar desde 1997.
El vocero de la Casa Blanca Ari Fleischer dijo que Bush aprobó las expulsiones la semana pasada, pero que discutió sobre "posibles remedios y consecuencias" con su equipo de seguridad nacional, casi inmediatamente después del arresto de Hanssen. "En ese momento el presidente ya estaba pensando cuál era la acción apropiada", dijo Fleischer.
El ministro ruso de Relaciones Exteriores Igor Ivanov dijo que la medida fue de carácter "político". "Si existían dudas o interrogantes, esto fácilmente pudo arreglarse mediante canales o contactos especiales", agregó Ivanov en una declaración que leyó por la televisora estatal ORT.
"Desafortunadamente, Washington ha escogido otra vía, por lo que esta medida no puede considerarse de otra forma que una medida política", dijo el canciller.
Funcionarios rusos prometieron "responder adecuadamente", lo que indica la posibilidad de que diplomáticos estadounidenses pronto sean expulsados de Moscú.
El secretario de Estado norteamericano Colin Powell dijo que conversó el jueves con Ivanov sobre las expulsiones diplomáticas, y le comunicó "Consideramos que este caso está cerrado".
Powell dijo a la prensa que "tenemos gran interés en mantener relaciones productivas y de cooperación con Rusia. Y tengo la intención de seguir trabajando para promover tal interés".
El embajador ruso Yury Ushakov fue convocado al Departamento de Estado para entrevistarse con John Byerly, que dirige la oficina de asuntos rusos y otras repúblicas de la antigua Unión Soviética.
"Presuntamente harán lo mismo con algunos de nuestros funcionarios más experimentados", dijo el senador demócrata Bob Graham, vicepresidente de la Comisión de Inteligencia del Senado. "Es así como puede esperarse que funcionen estos incidentes de contrainteligencia cuando se ponen escabrosos".
Se trata de la mayor expulsión de diplomáticos desde la Guerra Fría, y contribuye a ensombrecer aún más las relaciones entre los gobiernos de Bush y Vladimir Putin, que encabezó la KGB.
En Moscú, una reunión entre el líder del Partido Comunista Guennady Zyuganov y el embajador estadounidense James Collins fue cancelada luego de que el enviado de Estados Unidos se comunicó la mañana del jueves con el Ministerio de Relaciones Exteriores, dijo el vocero de Zyuganov.