CARACAS.- El mayor sindicato petrolero del país acordó convocar a una huelga nacional de 48 horas a partir del miércoles en protesta por la negativa de la estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA) a otorgar un incremento salarial de 15% aprobado por el gobierno para los trabajadores públicos.
Como parte de las acciones de protesta los trabajadores petroleros del estado occidental Zulia, donde se concentran los mayores centros de producción de crudos del país, iniciaron este martes paros parciales de actividades y tomas de algunas de las instalaciones de distribución de gasolina de PDVSA.
El ministro de la Secretaría, Elías Jaua, declaró que el gobierno "no puede ceder ante el chantaje" de los dirigentes sindicales, a la vez que comentó que la huelga convocada por los empleados petroleros no se ajusta a la ley.
El ministro del Interior, Luis Miquilena, comentó a la salida de un Consejo de Ministros en la residencia presidencial, que el conflicto laboral de la industria petrolera es "absolutamente absurdo" porque "no tiene ninguna base ni moral, ni ética, ni económica".
"Se está tratando de crear una situación conflictiva totalmente artificial en el país... no podemos permitir que artificialmente se cree una situación conflictiva", agregó Miquilena.
El Presidente Hugo Chávez evaluó este martes en el Consejo de Ministros las acciones de protestas de los trabajadores.
Algunos voceros oficiales han calificado las amenazas de huelga de los sectores petrolero, siderúrgico, construcción y educación, como parte de una campaña organizada para desestabilizar el gobierno.
El presidente de la Junta de Conducción Sindical de Federación de Trabajadores Petroleros (Fedepetrol), Félix Jiménez, declaró a la AP que la huelga nacional "está vigente" a pesar del llamado a conciliación que hizo este martes el Ministerio de Trabajo.
Jiménez expresó que las "tácticas dilatorias" que utilizó la directiva de PDVSA, durante las últimas semanas, para prorrogar una decisión sobre el pago del incremento de 15% "agotaron la paciencia de los trabajadores", y es por ello que decidieron convocar a un paro general.
Señaló que a los trabajadores petroleros le corresponde el aumento de 15% que aprobó Chávez para todos los empleados públicos a comienzos de año.
El conflicto de la principal industria del país se produce en medio de un tenso ambiente laboral en el que los trabajadores de los sectores siderúrgico, educativo y de construcción han amenazado al gobierno con iniciar huelgas nacionales para exigir mejoras salariales.
El presidente de PDVSA, general Guaicaipuro Lameda, desestimó este martes las protestas que iniciaron los trabajadores petroleros en el Zulia, y sostuvo que el conflicto laboral "no es relevante".
Lameda, quien viajó a la ciudad occidental de Maracaibo para evaluar los planes de contingencia que tomará PDVSA para enfrentar las protestas de los trabajadores, precisó que aspiraba a que los dirigentes sindicales lleguen a un arreglo con la empresa y el Ministerio del Trabajo.
Jiménez descartó que la convocatoria a huelga responda a intereses electorales de los dirigentes sindicales o a supuestas conspiraciones contra el gobierno.
"Todos (los trabajadores) están encendidos porque no ha existido una política laboral de parte del gobierno que permita llegar a un clima de paz para evitar situaciones como esta" sostuvo Jiménez.
"Esa conducta del Presidente (Chávez) de estar confrontando permanentemente a todo el mundo, a los medios de comunicación, a la iglesia a los trabajadores,...va a llevar a este gobierno a situaciones que pudiésemos lamentar", agregó el dirigente sindical.
Los trabajadores petroleros ganan un sueldo promedio mensual de 340.000 bolívares (unos 484 dólares).
Hace cinco meses los trabajadores petroleros realizaron una huelga nacional de cuatro días que puso a las puertas de una crisis a la principal industria del país, y obligó al gobierno a aceptar el incremento salarial de 6.000 bolívares (unos 9 dólares) exigido por los sindicatos.
En PDVSA laboran unas 40.000 personas, de las cuales unas 20.000 trabajan de forma directa, y otras 20.000 a través de empresas contratistas.
