GUAM/WASHINGTON.- La tripulación del avión espía que estaba retenida en la isla china de Hainan desde el 1 de abril abandonó el jueves el territorio estadounidense de Guam, en el Océano Pacífico, para dirigirse hacia Hawaï, en la segunda fase de su regreso a casa, informaron testigos.
Los 24 estadounidenses -21 hombres y tres mujeres- serán sometidos a exámenes médicos y mantendrán un primer encuentro con altos oficiales de las fuerzas armadas de Estados Unidos en Hawaï.
Posteriormente continuarán el viaje hacia su base, en el estado norteamericano de Washington, para reunirse con sus familiares.
En Carolina del Norte, el Presidente George Bush se declaró "orgulloso y lleno de reconocimiento" hacia la tripulación.
"Han sido días difíciles para todas las familias, y estos días nos recuerdan los sacrificios que hacen todos nuestros hombres y mujeres de uniforme, así como sus familias, cada día, por la libertad", dijo.
Aún quedan por solucionar sin embargo algunas cuestiones, como la repatriación del avión espía EP-3, para lo que responsables chinos y estadounidenses se reunirán el 18 de abril, y el futuro de los vuelos de reconocimiento estadounidenses en las costas de China.
El primer ministro chino, Zhu Rongji, dijo el jueves que China se reservaba el derecho de responsabilizar a Estados Unidos por el choque entre el avión estadounidense y un caza chino.
La liberación de los estadounidenses no significa que el caso haya terminado, dijo Zhu, citado por la agencia estatal de noticias Xinhua.
"Todas las responsabilidades del incidente recaen en el lado estadounidense", dijo Zhu al presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, Horri Holkeri, de visita en Beijing.
Este fue uno de los primeros comentarios públicos de Zhu acerca de la polémica entre China y Estados Unidos que había amenazado las relaciones entre ambas potencias.
El avión espía EP-3, dotado con la última tecnología, realizó un aterrizaje de emergencia en la isla de Hainan el 1 de abril tras colisionar en vuelo con un caza chino, que se precipitó al mar y cuyo piloto está desaparecido.
China decidió liberar a la tripulación después de que Washington dijera en una carta que "lamentaba mucho" que el avión estadounidense hubiese entrado en espacio aéreo chino y aterrizado en Hainán sin permiso, y también por la desaparición del piloto.
Beijing había pedido a Estados Unidos que asumiera total responsabilidad por el incidente y que ofreciera una completa explicación y disculpa.
Pero Estados Unidos mantiene que sus pilotos no hicieron nada malo.