TOKIO.- El ex primer ministro, Ryutaro Hashimoto, se inscribió el jueves en la contienda por la presidencia del Partido Liberal Demócrata (PLD) que ha gobernado a Japón por casi medio siglo.
Los aspirantes a sustituir al primer ministro, Yoshiro Mori, registraron el jueves sus candidaturas y revelaron las fórmulas para rescatar a la segunda economía del mundo del estancamiento en que está sumida.
Hashimoto, amplio favorito, competirá contra el reformista Junichiro Koizumi; el jefe político del PLD, Shizuka Kamei; y el ministro de Asuntos Económicos, Taro Aso.
"Me gustaría tener la oportunidad de hacer frente a los retos que enfrenta Japón", dijo Hashimoto, de 63 años, en una rueda de prensa.
Afirmó que su meta era legislar medidas en un plazo de 200 días para ayudar a la recuperación de la economía y a que los bancos resuelvan su grave problema de morosidad.
"Para revivir a la economía, tan pronto como sea posible, presentaremos medidas para alcanzar 'un nuevo crecimiento a través de reformas estructurales'", dijo en un comunicado.
Los contendores tienen cerca de dos semanas para hacer campaña antes de la elección del 24 de abril.
La presidencia del PLD implica virtualmente el puesto de primer ministro en Japón, dada la mayoría que posee la coalición liderada por ese partido en la poderosa cámara baja del parlamento.
Los analistas prevén que la campaña se centrará alrededor de Hashimoto y de Koizumi, una pelea también entre conflictivas políticas económicas.
Aunque Hashimoto es reconocido como el propulsor de una dolorosa reforma fiscal, ha bajado el tono de sus propuestas, ya que está en oposición a lo que piensa la base tradicional de apoyo del partido, particularmente agricultores y pequeños empresarios.
"Me gustaría aprender de los errores que cometí hace tres años", dijo Hashimoto.
La decisión de Hashimoto cuando era primer ministro en 1997 de elevar los impuestos y recortar el gasto fue ampliamente rechazada por inclinar la economía hacia la recesión, y establecer el escenario para una aplastante derrota del PLD en las elecciones de 1998 de la cámara alta, revés que le obligó a dimitir.
Y en el otro extremo está Koizumi, de 59 años, quien ha impulsado la necesidad de privatizar el servicio postal como paso hacia la modernización del gobierno.
Koizumi dijo que quería dirigir al problema de la gigantesca deuda de Japón si llega a ser primer ministro, al agregar que el gobierno debería limitar la emisión de nuevos bonos a 30 billones de yenes (240.500 millones de dólares) por año.
Una serie de paquetes de estímulos intentaron reactivar a la economía del estancamiento en que está sumido Japón, que tiene la mayor carga de deuda de cualquier país industrializado.