SARAJEVO.- Un millar de serbobosnios se manifestaron la noche del martes en el barrio de Dobrinja, en Sarajevo, para impedir a la policía croatobosnia instalarse en una zona que le atribuye la nueva línea de demarcación de ambas comunidades.
Para evitar enfrentamientos, la policía recibió la consigna de no entrar en el barrio, cuyo control debían asumir a partir de la medianoche local (22h00 GMT).
La línea de demarcación entre la Repúblika Srpska (RS), entidad serbia de Bosnia, y la Federación Croato-musulmana, la otra entidad del país, pasa por ese barrio y fue redefinida el martes mediante un arbitraje internacional.
En el nuevo esquema, unas 800 viviendas ocupadas por serbios y situadas hasta ahora en zona serbia pasan a territorio de la Federación croato-musulmana.
La policía de la Federación croata-musulmana habían recibido la orden de tomar el control de esa nueva zona a partir de medianoche, pero renunció a ejecutar la orden ante la agitación que provocó su presencia.
Los serbios del barrio temen ser expulsados de estas viviendas, que ocupan legalmente pero que estaban habitadas por musulmanes antes de la guerra y el asedio a Sarajevo.
Este miércoles los serbios han convocado a una reunión delante de una iglesia del barrio.
El gobierno de la RS condenó severamente este martes el arbitraje internacional que "sólo persigue desestabilizar a la entidad serbia, al despojarla de parte de su territorio".
