TAIPEI.- El presidente taiwanés, Chen Shui-bian, defendió hoy el escudo antimisiles estadounidense y señaló que China no es un "un socio cien por cien cooperativo" para Washington.
Además, criticó la política china de no mantener diálogo con su Gobierno y tratar de ganarse a la oposición, con lo que se está fomentando la tensión e impide la resolución del conflicto.
"Espero disponer de una oportunidad para mantener un contacto, comunicación y diálogo directo con China continental", apuntó el mandatario taiwanés, miembro del independentista Partido Demócrata Progresista.
Chen considera que se ha registrado un cambio en la política de Estados Unidos hacia China, que ha pasado de la asociación estratégica a la competición, con la llegada al poder de George Bush.
"Estados Unidos no ve a China como un enemigo total, pero Pekín no será tampoco un socio cien por cien cooperativo, como se ha visto en el manejo de la colisión aérea cerca de la isla de Hainan", dijo Chen, en una entrevista hecha publica por la agencia local CNA.
El mandatario taiwanés se mostró partidario del desarrollo de un escudo contra misiles y de que Washington siga suministrando equipos bélicos avanzados a la isla, para asegurar la paz y proteger la democracia de Taiwán.
Sin embargo, expresó su disponibilidad a cancelar la compra de armas, en caso de que China abandone el despliegue de misiles en las cercanías de la isla y la modernización y mejora de su arsenal bélico.
"Sería mejor utilizar esos fondos para el desarrollo económico, construcción de infraestructura, cuidado médico, bienestar social y educación", añadió Chen.
China y Taiwán mantienen una disputa sobre la soberanía de la isla, donde en 1949 se refugió el Gobierno Nacionalista Chino tras ser derrotado en China continental por el ejército comunista.
Pekín considera a Taiwán una "provincia rebelde" y la isla afirma ser un país independiente y soberano, como heredero político de la República de China, fundada por el Partido Kuomintang en 1911 en China continental.