LIMA.- Alejandro Toledo y Alan García, candidatos que definirán en una segunda ronda electoral la presidencia de Perú, mostraron el viernes preocupación por el crecimiento de los "votos en blanco" en este país.
Según encuestas, los votos en blanco ya superan el tercio de los electores en desmedro de los dos aspirantes envueltos, según sus denuncias, en una "guerra sucia" y en una campaña para anular las boletas en los comicios que se realizarían no antes del 3 de junio.
"Es preocupante los votos indecisos (...) como país me preocupa porque tenemos una democracia que es débil y necesitamos fortalecerla", dijo Toledo a periodistas.
Toledo encabeza las preferencias con 39 por ciento, mientras que García ostenta un 32 por ciento, de acuerdo a cifras difundidas a fines de abril.
Sin embargo, la encuestadora Datum Internacional informó que en un reciente sondeo los votos en blanco ya suman 35 por ciento a nivel nacional, entre Toledo que va primero y García que marcha tercero en las preferencias.
"El voto en blanco ha logrado 10 puntos en una semana", dijo a Reuters Manuel Torrado, director de Datum.
El analista se excusó de precisar los porcentajes que tienen el economista Toledo y el ex presidente García, pues el sondeo fue elaborado para la firma privada Telefónica Perú.
Dos universidades locales difundieron esta semana sondeos que indican que entre los votos blancos, nulos, los indecisos y los que no contestan suman entre 37,5 por ciento y 41,5 por ciento en Lima.
La porción de votos blancos en Perú siempre ha sido alto en vísperas de un proceso electoral, pero analistas advierten que el nivel actual muestra una curva ascendente reforzada por una campaña promovida por los periodistas Jaime Bayly y Alvaro Vargas Llosa, éste último ex asesor de Toledo.
Ambos periodistas y escritores lanzaron la propuesta del voto en "blanco y viciado" tras denunciar a Toledo de presuntos actos de corrupción en su entorno.
Debate para bajar indecisos
Las elecciones peruanas se realizan como consecuencia del mayor escándalo de corrupción que derrumbó al gobierno del destituido presidente Alberto Fujumori, refugiado en Japón.
"Creo que sería de gran utilidad para bajar el porcentaje de indecisos que los equipos (de gobierno) presenten sus propuestas y que de una vez por todas los candidatos entren al debate y estoy proponiendo que lo hagamos el 18 de mayo", dijo Toledo en una barrio marginal de Lima.
César Zumaeta, presidente de la comisión política del Partido Aprista Peruano que postula a García, dijo que cree que la incertidumbre bajará días previos a las elecciones, cuando los candidatos hayan difundido sus planes de gobierno en un debate que proponen, por su parte, para el 20 de mayo.
"Claro que preocupa (los indecisos), pero la propia campaña se ha vuelto así por los últimos acontecimientos, principalmente en las filas de Perú Posible", a las que pertenece Toledo, afirmó.
Analistas explicaron que los votos en blanco se sustentan por la desconfianza de los electores en Toledo, quien no ha sabido aclarar denuncias en su contra, y en García, cuyo pasado lo acosa pues dejó en 1990 un país sumido en su peor crisis económico.
"El crecimiento de blancos y viciados es un claro aviso sobre problemas de gobernabilidad futura", advirtió por su parte el columnista Mirko Lauer, en el diario La República.
Torrado, de la encuestadora Datum, dijo sin embargo que los votos en blancos no pasarán de 37 por ciento debido al colchón de votos que dejaron Toledo y García en la primera vuelta.
"No tienen que pelear (ambos candidatos), sino tienen que enamorar a los votos en blanco", enfatizó el experto.