JERUSALÉN.- El Ejército israelí bombardeó con misiles tierra-tierra objetivos oficiales palestinos en la ciudad autónoma de Gaza hoy, jueves, en medio de una violencia que va en aumento y que todos los días se cobra vidas humanas.
El bombardeo - en el que resultaron heridas unos veinte palestinos, cinco de las cuales estaban graves- fue lanzado contra tres objetivos en el corazón de la ciudad de Gaza: el de los cuarteles generales de la Seguridad Nacional y de la Policía, y el de las oficinas del movimiento Al-Fatah.
Algunos de los misiles dieron en el blanco en el Edificio Asaraya, en el centro de Gaza y en el que se concentran los cuarteles generales de varios organismos de seguridad palestinos, y otros en la oficina principal de Al-Fatah situado en el barrio residencial de Rimal.
El bombardeo del Ejército de Israel se produjo alrededor de las 16.30 hora local (13.30 GMT), algunas horas después de que murieran dos obreros rumanos contratados por israelíes al estallar una carga explosiva colocada por palestinos en el centro de la franja de Gaza.
Poco después, el portavoz del líder palestino Yaser Arafat, Nabil Abu Rudaina, afirmó que el bombardeo a Gaza "es una grave escalada de la violencia y una guerra que ha lanzado Israel contra la dirección y el pueblo palestinos".
El portavoz de Arafat, presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) y líder de Al-Fatah, añadió que "el pueblo palestino continuará su lucha hasta llegar a Jerusalén y a sus lugares santos".
Por su parte, el primer ministro israelí, Ariel Sharón, dijo que el bombardeo a Gaza "forma parte de una batalla en la que está y estará envuelto Israel hasta que se recupere la seguridad y acabe el terrorismo".
Sharon añadió que "en esta batalla hace falta mucha paciencia, un largo aliento y una gran determinación, pero al final Israel vencerá".
Algunas horas antes, alrededor del mediodía, tropas israelíes habían invadido un territorio bajo control total palestino en la zona de Kisufim, donde a últimas horas de la mañana murieron los dos obreros rumanos por una carga explosiva colocada por palestinos.
Las tropas israelíes, que seguían en la zona a últimas horas de la tarde, destruyeron una posición de la Policía palestina, examinaron si en el lugar había más cargas explosivas, y arrancaron plantas y arbustos detrás de los que, según los militares, se ocultaban atacantes palestinos.
En la invasión israelí a la zona de Kisufim resultaron heridos tres oficiales de la Policía palestina, uno de ellos de gravedad.