LA PAZ.- El presidente de la Corte Nacional Electoral (CNE) Iván Guzmán denunció el jueves que diputados oficialistas intentan forzar su renuncia para supuestamente tomar el control del organismo con vistas a las elecciones de 2002.
De esa manea aludió al jefe del bloque de diputados de la gubernamental Acción Democrática Nacionalista (ADN), Fernando Kieffer, y al del MIR, Oscar Torrico, quienes han solicitado con argumentos confusos la dimisión a la presidencia del organismo de Guzmán, quien es considerado el único vocal imparcial de la CNE.
"Hay intereses bastardos de la politiquería nacional, ni siquiera de los partidos políticos. Esa politiquería bastarda utiliza una serie de pretextos y, desafortunadamente, ha encontrado un punto débil y lo utiliza para ese fin", declaró.
Se trata de la segunda advertencia de intentos desestabilizadores del sistema electoral que lanza Guzmán en menos de una semana, y del segundo vocal de los cinco que conformaban la CNE que se pronuncia en ese sentido.
La anterior semana, Jorge Lazarte renunció a su vocalía después de 10 años en la CNE en protesta por la politización de las cortes electorales, que supuestamente orquestó el oficialismo cuando eligió en febrero, en el Congreso, a vocales aparentemente vinculados a los partidos cogobernantes, lo cual es "inconstitucional".
Guzmán pareció apuntar con sus declaraciones sobre la existencia de "un punto débil" a la vocal de la CNE Alcira Espinoza, acusada de actuar como quinta columna del MIR dentro del organismo.
También dijo que los miembros de la CNE "sienten que no tienen autoridad sobre los vocales departamentales que el Congreso designó hace unos meses originando denuncias opositoras de que se estaría cocinando un fraude".
Así, se refirió a la campaña contra el gobierno que realiza desde esa elección el principal partido opositor Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), cuyo candidato, el ex presidente Gonzalo Sánchez de Lozada (1993-97), aparece en las encuestas independientes como favorito para ganar las elecciones de junio de 2002.
El MNR sostiene que el gobierno "asaltó las cortes para montar un monstruoso fraude" en favor del ex mandatario Jaime Prenuncia de Banzer.