MADRID.- Al menos trece personas resultaron heridas este viernes al estallar un coche-bomba en Madrid, en una concurrida zona comercial, colocado por la organización terrorista ETA a la misma hora en que concluía, oficialmente, la campaña para las elecciones vascas del próximo domingo.
La explosión se produjo alrededor de la medianoche en la calle de Goya, en el barrio de Salamanca, una de las zonas más exclusivas de la capital española, donde se concentran numerosas tiendas de marcas de lujo y restaurantes.
Uno de los heridos, un guarda privado, presenta lesiones de gravedad, informaron fuentes de los servicios de emergencia, aunque no se teme por su vida. La explosión, de gran potencia, causó graves destrozos en las fachadas de los edificios próximos: un comercio, una farmacia y una sucursal del banco BBVA que resultó totalmente destrozada, según fuentes de los Bomberos.
El vicepresidente primero del Gobierno y ministro del Interior, Mariano Rajoy, que acudió al lugar minutos después del atentado, aseguró a los periodistas que con esta explosión "pudo producirse una gran masacre". Según fuentes policiales, se trata de una "bomba trampa", dado que unos siete minutos antes de la explosión un comunicante, que dijo hablar en nombre de ETA, avisó por teléfono a los Bomberos de la existencia del coche-bomba, un Renault Clío, por lo que no hubo tiempo para desalojar la zona.
El vehículo había sido robado hace dos días en Madrid, según las fuentes.
Tras el atentado, el área fue acordonada por la policía y los servicios sanitarios de emergencia instalaron un hospital de campaña para atender a los heridos y a los vecinos, que salieron a la calle alarmados y conmocionados por la fuerte explosión.
Un vecino de uno de los inmuebles de la calle de Goya afectados por la explosión del coche-bomba aseguró a EFE que pensó "que se caía el edificio". Dicho vecino, que no quiso identificarse, refirió que era casi la medianoche cuando se escuchó una fuerte explosión que hizo temblar su vivienda y se rompieron los cristales de la ventanas.
Este atentado se produjo a la misma hora en la que se cerraba la campaña electoral para las elecciones regionales en el País Vasco, del próximo domingo.
En esos comicios, el Partido Popular (PP) de José María Aznar, en el Gobierno, pretende desalojar del poder a los nacionalistas, quienes gobiernan ininterrumpidamente desde hace veinte años.
De hecho, Aznar fue informado del atentado cuando regresaba a Madrid desde Vitoria, la capital del País Vasco, tras haber participado en el último mitin electoral del PP, según fuentes oficiales. El dirigente socialista José Blanco aseguró a EFE que ETA ha querido de nuevo "sembrar el pánico" con un atentado en Madrid en el arranque de la jornada de reflexión del sábado.
El "número dos" del principal partido de la oposición subrayó que, con esta acción terrorista, ETA ha demostrado que "teme a las urnas" y desprecia la voluntad de los vascos. El coche-bomba activado hoy eleva a 29 el número de atentados cometidos por ETA en Madrid mediante este procedimiento, que ha costado la vida a un total de 53 personas, entre ellas un niño de dos años, y es el quinto desde que finalizó la tregua en diciembre de 1999.
ETA, que busca la independencia del País Vasco por medios terroristas, ha asesinado a cerca de 800 personas en los últimos treinta años. El pasado domingo día 6 fue asesinado en Zaragoza el senador Manuel Giménez Abad, presidente del Partido Popular (PP) en la región de Aragón, en el norte de España.