EL CAIRO.- Los planes del líder palestino Yasser Arafat de continuar la "intifada" recibieron hoy un "unánime apoyo" durante una reunión panárabe celebrada en El Cairo, en la que se decidió suspender los contactos políticos con Israel hasta que este país "ponga fin a sus agresiones contra los palestinos".
La decisión fue tomada durante una reunión extraordinaria de los jefes de las diplomacias de Egipto, Siria, Arabia Saudita, Jordania, Marruecos, Túnez, Yemen, Bahrein y la Autoridad Nacional Palestina (ANP), en la que estuvo presente Arafat.
Estos estados forman el Comité de Seguimiento de la "intifada" (levantamiento) palestina, creado durante la cumbre extraordinaria de la Liga Arabe, integrada por 21 países más Palestina, que se celebró en octubre pasado en El Cairo.
Según el comunicado final del encuentro, que duró ocho horas, "el comité recomendó apoyar financiera y políticamente a la 'intifada' del pueblo palestino contra la ocupación israelí hasta que recupere sus derechos legítimos".
También exige "una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU o de la Asamblea General de Naciones Unidas para decidir una protección internacional para los palestinos y examinar la peligrosa situación causada por el continuo escalonamiento israelí".
Asimismo, el comité recomendó a los Estados de la Liga Arabe abrir una cuenta bancaria para "recibir las donaciones de los pueblos árabes" en apoyo a la "intifada".
"Los ministros decidieron suspender todo tipo de contactos políticos con el Gobierno israelí mientras continúen la agresión y el asedio al pueblo y la ANP", añade la nota.
Indica que Arafat, que preside la ANP, "explicó al comité la grave situación en los territorios palestinos, causada por la continuidad de las agresiones israelíes, en las que se utilizaron aviones de combate F-16".
Arafat afirmó ante los ministros que su pueblo "continuará la lucha" contra "la guerra israelí" en Gaza y Cisjordania, y pidió protección internacional para los palestinos.
Según el líder palestino, "sólo ayer, dieciséis palestinos murieron y más de cien resultaron heridos en los ataques israelíes contra Tulkarem, Ramalá, Jenin y Gaza".
Esos ataques tuvieron lugar en represalia por un atentado de un suicida islámico que causó, según Israel, la muerte a seis civiles israelíes y más de cien heridos en la ciudad de Natania.
"El Comité decidió emprender una ofensiva diplomática para explicar la postura árabe y advertir contra las consecuencias de las agresiones israelíes sobre la seguridad y la estabilidad en la zona" de Oriente Medio, añade.
Además de intensificar la coordinación interárabe, los contactos incluirán a Estados Unidos y Rusia, países que patrocinan el proceso de paz, así como a los demás miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU, y la Unión Europea (UE).
Los reunidos encargaron al nuevo secretario general de la Liga Arabe, Amro Musa, explicar al secretario general de Naciones Unidas, Kofi Annan, la "peligrosa situación causada por los ataques israelíes y que amenaza la seguridad, la estabilidad y los intereses de los países del mundo en la región".
El escrito, leído por el secretario general adjunto de la Liga Arabe, Ahmed Ben Heli, expresa también "el total apoyo árabe" a Siria y Líbano contra las recientes amenazas israelíes, tras el ataque del lunes de la guerrilla libanesa chiíta a posiciones fronterizas del Ejército israelí.
El uso por Israel de aviones de combate F-16 contra las zonas palestinas ha sido condenado por los países árabes en comunicados separados, así como por el secretario general de la Liga, que lo calificaron como "grave escalonamiento".
El agravamiento de la situación se produce antes de la gira que el responsable de la política Exterior y de Defensa de la UE, Javier Solana, tiene previsto iniciar mañana por Oriente Medio, en la que visitará Egipto, Siria, Líbano, Jordania, la Autonomía Palestina e Israel.
