BOGOTA.- Un coche bomba cargado con 250 kilogramos de TNT fue desactivado el lunes por la policía frente a la sede de un periódico comunista en un concurrido sector residencial y comercial de la capital de Colombia, informaron las autoridades.
El vehículo, una camioneta llena de plátanos y naranjas, fue estacionado a pocos metros de la sede del semanario Voz, órgano de difusión del Partido Comunista y un importante medio que divulga los pensamientos políticos de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
"La tragedia hubiera sido bastante grande aquí, con destrucción de dos manzanas a la redonda", dijo el subdirector operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, coronel Luis Contento.
El TNT es un explosivo más potente que la dinamita. El explosivo estaba en el interior de una bomba MK-82 de fabricación estadounidense, utilizada por fuerzas aéreas de varios países latinoamericanos, precisó la policía.
"Desactivamos este vehículo y pudimos salvar un poco de vidas", añadió el oficial, quien declaró que no está claro cuál era el objetivo del coche bomba.
Este el tercer vehículo cargado de explosivos que desactivan las autoridades colombianas en los últimos tres días. El sábado por la noche la policía desactivó dos automóviles cargados con explosivos en la noroccidental ciudad de Medellín.
En esa ciudad, la tercera más poblada de Colombia con 1,8 millones de habitantes y un importante polo empresarial e industrial, estalló el jueves por la noche un vehículo cargado con 20 kilos de explosivos.
La explosión, la peor en el último año en este país de 40 millones de habitantes, mató a ocho personas, hirió a 137, destruyó siete vehículos y causó destrozos en 44 locales.
ACUSAN A ULTRADERECHA DE FALLIDO ATAQUE
El director de Voz, Carlos Lozano, fue nombrado recientemente miembro de una comisión que se encargará de formular recomendaciones al gobierno para luchar contra los paramilitares de ultraderecha, que combaten con métodos violentos a la guerrilla en medio del conflicto interno.
La creación de esa comisión fue acordada en febrero en la reunión entre el presidente Andrés Pastrana y el máximo jefe de las FARC, Manuel Marulanda, alias "Tirofijo", con las que se dio un nuevo aire a la negociación de paz iniciada en 1999 y con la que se busca poner fin a la confrontación.
"Es una acción del paramilitarismo, de la ultraderecha, que quiere acabar con los proyectos de paz en Colombia", dijo Lozano.
El conflicto interno de casi cuatro décadas que afronta este país dejó 40.000 muertos en la última década
