BRUSELAS.- La Unión Europea anunciará oficialmente hoy su posición con relación a la abertura del mercado de trabajo a los europeos del Este, después de la ampliación de la Unión.
El documento final fue posible después que Portugal y España retiraran sus últimas reservas técnicas, cediendo a la exigencia de Alemania y Austria -que quieren una espera de hasta siete años para que los ciudadanos de los futuros países miembros de la UE puedan entrar en el mercado de trabajo de la comunidad.
Los dos países ibéricos temen que la expansión de la UE para el Este Europeo provoque una gran afluencia a los mercados de trabajo, de forma a generar demasiada concurrencia con mano de obra barata.
España había condicionado su aprobación para el ingreso de otros países en la UE, a la ayuda millonaria a las regiones con deficiencias estructurales.
El país recibirá ayuda de casi 50 mil millones de euros (US$ 42 mil millones, aproximadamente) de los cofres de la UE, hasta el 2006.
Portugal recibirá su cuota, pero el valor aún no se definió. Francia también abrió mano de sus restricciones con relación a las cuestiones agrícolas para poder llegar a una decisión consensual.
Aún dentro del acuerdo, quedó establecido un período transitorio de siete años para la circulación abierta de capitales.
Hoy, en Bruselas, se lleva a cabo la primera ronda conjunta de negociaciones para la ampliación del bloque europeo con los países candidatos. Polonia, República Checa, Eslovenia, Hungría Malta y Estonia serán informados de la directiva firmada por los Quince países con relación a su entrada en la comunidad.